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La ilusión de la séptima Copa Libertadores se desvaneció para Boca Juniors en la final del pasado sábado en Río de Janeiro, esto tras de caer con Fluminense en el alargue por un golazo de Kennedy. Luego Frank Fabra vio la tarjeta roja en el final del primer tiempo de esa prórroga y todo se terminó de ir al suelo.
El lateral colombiano quedó en el ojo de la vehemente crítica y de los insultos de los hinchas, pues su expulsión irresponsable por darle un cachetazo a un rival dejó a Boca sin la posibilidad de buscar el empate con ventaja numérica (Kennedy había sido expulsado en Fluminense). Además, su displicencia y poco compromiso a lo largo del partido también lo dejaron expuesto en los dos goles, reviviendo otras escenas similares en varias oportunidades que a la postre le ‘perdonaron’.
Fabra tiene contrato con Boca hasta diciembre de 2025, pero ya ningún hincha lo aguanta; así se lo han hecho saber al club, al jugador y su propia familia a través de redes sociales, por lo que desde la directiva han decidido protegerlo, incluso oficializando una lesión que a nadie convence, pero tampoco lamentan.
Después de su ‘papelón’ en la final, Boca Juniors anunció que Fabra sufría una “distensión del ligamento lateral interno de la rodilla derecha”, lesión que puede tardar hasta un mes para recuperarse. La información no fue muy creíble teniendo en cuenta que durante el partido en Río nunca aquejó ninguna molestia y salió por sus propios medios cuando lo expulsaron.
Pero como nadie en el ’Mundo Boca’ quiere verlo, no hubo profundidad ante esa información y solo se conformaron con no convocarlo en el partido del pasado miércoles visitando a San Lorenzo, pues el técnico interino Mariano Herrón alineó a Saracchi.
No obstante, Boca jugará su último partido del año en La Bombonera contra Newell’s este domingo por la Copa de la Liga con la obligación de sumar puntos en la tabla anual, varios hinchas esperaban que Fabra estuviera presente para recriminarle con dureza su irresponsabilidad de Río, que se sumó a un sinfín de cuestionamientos hacia su profesionalismo a lo largo de 8 años con recuerdos como el de las semifinales de Copa Libertadores 2020, pero obviamente no apareció en la convocatoria para ese cotejo.
Probablemente sin estar lesionado, pero sí en un durísimo estado anímico como lo comentó Riquelme en la rueda de prensa del lunes donde dijo que el colombiano llegó llorando al predio, Fabra tampoco fue tenido en cuenta para la Selección Colombia (tenía chance de ser llamado para las Eliminatorias pese a su mal partido contra Uruguay hace un mes) y su futuro es una incógnita. Boca lo protege de no sentir el rigor de los hinchas en este final de temporada, pero en el mercado de pases todos le pedirán a Riquelme (o el próximo presidente) en masa que se deshaga del colombiano, a quien ya nadie quiere. Por ahora el club opta por ‘esconderlo’ a la espera que baje el calor de la crisis.
Este viernes en ‘ESPN’ avisaron que Fabra podría reaparecer el miércoles 22 de noviembre en las semifinales de Copa Argentina contra Estudiantes en Córdoba (partido trascendental por la pelea para clasificar a la Copa Libertadores 2024) y de nuevo se despertaron dudas sobre su distensión de ligamento, pues los tiempos de recuperación serían más largos. Lo más probable es que no aparezca más este año (o lo haga en la última fecha de la copa de la Liga el 26 de noviembre visitando a Godoy Cruz en Mendoza con un equipo alternativo) amparado en esa extraña lesión y, por ende, que se busque su salida en el mercado para la tranquilidad de todas las partes. El fin de ciclo en Boca es innegable y ya están dando señales pese a la protección institucional.