River se queda con el Superclásico ante Boca en un partido dramático y lleno de polémica

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Lanzini celebra el gol de la victoria. (Fotobaires)

Por la fecha 15 de la Liga Profesional 2024, en La Bombonera, se llevó adelante una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino entre Boca y River, en el que se terminó imponiendo el ‘millonario’ por 1 a 0 gracias a un gol de Manuel Lanzini en la primera parte.

Primer tiempo

Una primera parte en la que Boca no pateó al arco, literalmente hablando, y apenas tuvo algunas aproximaciones de peligro fundadas básicamente en pelotas divididas y segundas pelotas ganadas. Si los de Martínez no tuvieron acciones de peligro fue en gran parte por el notable rendimiento de la última línea y la mitad del campo, donde los de Gallardo empezaron a ganar el período.

La primera clara de peligro fue al minuto 13, cuando Colidio de frente al arco y con espacio abre a la izquierda para la llegada de Enzo Díaz, este pudo ejecutar pero decidió apoyarse en Fonseca, que llegaba de frente y le dio con alma y vida desde afuera del área, en una pelota que terminó en el pecho de Lema para evitar el gol.

River era mejor en todas las facetas del juego y a los 20 lo tradujo en el resultado. Lanzini le ganó una dividida en la mitad del campo a Miramón, encaró al arco, abrió para Colidio, este eludió a Lema, remató provocando un rebote de Romero perfectamente capitalizado por el ex West Ham, quien definió para poner justicia en el marcador.

Boca seguía perdido, inconexo, nervioso y jugando bajo el canto de la hinchada que exigía. El nerviosismo se apoderó de las acciones para el local y casi lo paga con el segundo. Tras un saque de arco de Armani, Rojo despeja mal y deja solo mano a mano a Colidio, quien tuvo el segundo pero resolvió tirarle un sombrerito a Romero, que adivinó la intención.

La jugada más peligrosa de Boca en el primer tiempo fue una arremetida de Medina, quien termina tirándose entrando al área, y de esa jugada nació una réplica que provocó otro blooper, esta vez de Romero, quien salió a tres cuartos a despejar, falló y para su suerte Rojo lo previno, evitando que Colidio se fuera con arco vacío.

Segundo tiempo

En el complemento Boca salió con bastante más agresividad e intensidad a jugar, a proponer un partido físico a sabiendas de que se trataba de una jornada poco iluminada en términos de juego asociado.

En esa nueva propuesta, a puro empuje, logró someter por momentos a River y generar más opciones que durante la primera parte. Los ingresos de Zeballos y Giménez tuvieron efecto, y promediando el complemento los de Martínez lograron su mejor momento en el partido, capitalizado por un remate al travesaño de Advíncula a la salida de un tiro de esquina.

Sobre el cierre, Borja tuvo la gran oportunidad de sentenciar las acciones tras un error de Pol Fernández, quien la perdió en la salida con Mastantuono, este habilitó al colombiano y una demora a la hora de resolver le permitió a Lema interponerse y evitar el segundo.

Ya en tiempo de descuento Zeballos tuvo la más clara del partido para el Xeneize, recibiendo un pase filtrado de Zenón, pero a la hora de definir se encontró con Armani encima, en una intervención decisiva del arquero que sirvió para evitar la caída de su arco.

Faltaban segundos para el desenlace, cuando Zeballos centra desde la izquierda, y tras una serie de rebotes Giménez termina convirtiendo pero la pelota, previo a ingresar al arco le dio en uno de sus brazos y en consecuencia el árbitro Ramírez, a instancias del VAR, terminó por anularlo en forma correcta, tomando así la decisión final de un Superclásico picante, con drama y suspenso hasta el final.

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