El implacable paso invicto de los Rays de Tampa Bay del mexicano Randy Arozarena en el inicio de la temporada, ya dejó huella en el libro de récords de las Grandes Ligas.
En las primeras dos series de la temporada, los Rays han lanzado bien, con efectividad colectiva de 2.00 en los primeros seis partidos. Han desplegado una gran defensa. Han anotado más carreras que nadie en la MLB, con una alineación exhibiendo una gran combinación de contacto, poder y velocidad.
Los Rays están ganando los juegos que deben ganar – y lo están haciendo con autoridad. Han superado a sus rivales por un total de 31 carreras (44-13). Han ganado cada uno de sus primeros seis encuentros por al menos cuatro rayitas, siendo la racha más larga para comenzar un año en la era moderna y la más larga en la historia de MLB, de acuerdo con ‘Opta Stats’, desde que los Cafés de San Luis lo hicieran en sus primeros 13 encuentros en 1884.
“Tenemos mucha magia en este equipo”, señaló el relevista Ryan Thompson. “Creo que muchos de nosotros empezamos a percibirlo en los entrenamientos. Es difícil de explicar. Creo que la vibra es única en esta campaña”
Los Rays sabían que contaban con un pitcheo y una defensa estelares. Sin embargo, la sorpresa más agradable hasta ahora ha sido lo que ha producido la alineación, que batea .284/.348/.542 con 13 jonrones – la mayor cantidad en la historia del club en sus primeros seis partidos de una temporada.
“Para ganar los primeros seis juegos en fila, mucha gente tiene que hacer bien las cosas”, expresó el manager Kevin Cash. “Se siente como que, de arriba a abajo, todo el roster está aportando de una manera positiva”.