Randy Arozarena González, el jugador que se robó los corazones de toda la afición en México, el cubano naturalizado mexicano es jardinero de los Tampa Bay Rays de la Major League Baseball y fue pieza clave para que el equipo que comandó Benjamín Gil, hiciera historia en el Clásico Mundial de Béisbol.
Arozarena se nacionalizó para representar al Tricolor en el Mundial y desde el inicio del torneo demostró que era un jugador diferente, desde su calzado al cual le llama “las botas del poder”, ya que según él al usarlas se llena de energía y de esa manera mejora su juego.
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El naturalizado mexicano salía a entrenar con un sombrero de charro puesto previo a los juegos de este Clásico Mundial, lo cual deja en claro el orgullo que siente por el país al que ahora representa.
Otro aspecto que llamó mucho la atención de Randy fueron sus celebraciones sobre las cuales afirmó en entrevista para la MLB: “Esto es con flow, hay que divertirse. El béisbol te da grandes momentos como el que estoy viviendo con México en el Clásico Mundial de Béisbol. Eso es felicidad. Es para posar con todas las cámaras y te agarren con una buena foto”.
Por si lo anterior fuera poco, Arozarena fue captado en múltiples ocasiones dando autógrafos en pleno juego a la afición que se encontraba en el jardín izquierdo, incluso en uno de sus momentos más épicos cuando realizó una atrapada negando un cuadrangular al equipo de Japón en las semifinales, Randy se dio tiempo de mostrarle todo su cariño a los fanáticos.
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