Águilas Doradas trabaja para Junior: las claves de la derrota del Deportes Tolima en Ibagué

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Facundo Boné y Jesús David Rivas disputan la pelota. - Vizzor Image.
Facundo Boné y Jesús David Rivas disputan la pelota. – Vizzor Image.

La gran expectativa de este partido pasaba por las opciones del Deportes Tolima. Una victoria lo ponía como el primer finalista confirmado para la gran final del campeonato. En frente estaba Águilas Doradas, equipo que fue el mejor de la primera fase, pero que esta instancia semifinal ha sido una auténtica decepción.

Junior era el equipo que, antes de medirse en visita al Deportivo Cali, estaba más pendiente de lo acontecido en Ibagué. Necesitaba que el conjunto antioqueño recordara sus ya viejas formas para que las opciones matemáticas mantuvieran viva la competencia en el cuadrangular A. El público volvió a aparecer en el Manuel Murillo Toro.

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Hechos inesperados

Los minutos iniciales hicieron pensar en un partido sin contratiempos para el conjunto local. El Tolima empezó atacando y merodeando el área rival. Sin embargo, Águilas supo aguantar y organizar el bloque para evitar que el Pijao se acercara con peligro real. La novedad de Facundo Boné en remplazo de Jeison Lucumí se notó para mal.

La primera gran ocasión fue para la visita. Jesús David Rivas se metió al área y recibió la pelota en un mano a mano contra Neto Volpi, pero la puntería no estuvo fina y la pelota se fue hacia la tribuna. Esa ocasión pareció abrirle los ojos al cuadro antioqueño, que empezó a recuperar la pelota más rápido y a proponer avances más contundentes.

Dos columnas se caen

Águilas Doradas estaba cerca del gol. Un nervioso César Haydar perdió la pelota en la salida contra la presión de Marco Pérez. Jhon Fredy Salazar fue el que llegó a posición de remate, hizo resbalar al portero y sacó un disparo que Marlon torres salvó casi sobre la línea.

El esfuerzo de Neto Volpi fue excesivo y se fue al suelo. El cuerpo médico del Tolima confirmó que el golero titular se había lesionado y se ordenó el cambio. El único jugador que había estado en los 25 juegos del campeonato ya no estaba para brindar seguridad. Christian Vargas tuvo que entrar antes de media hora para cuidar la portería.

En gran parte, el primer tiempo fue aburrido y quedó debiendo. Ambos equipos estaban priorizando el orden defensivo. Diego Herazo también tuvo inconvenientes físicos y Brayan Gil fue el elegido para suplir al goleador del Tolima de cara a la segunda mitad.

Trabajar para los demás

Tolima pudo acercarse en un intento con volea de media distancia de Kevin Pérez que pasó cerca de un palo. Álex Castro entró pronto para alimentar el ataque y ponerse en la posición de Boné. César Farías refrescó su equipo con Wilson Morelo y Carlos Arboleda. A partir del minuto 60, el Pijao se empezó a acercar con más peligro y obligó al repliegue del visitante.

El infierno estuvo a punto de desatarse por una acción de supuesta falta al juego limpio. Contreras había enviado la pelota por fuera para que atendieran a uno de sus compañeros que estaba aparentemente golpeado. No había nada grave y Yhorman Hurtado quiso reponer de banda con intención ofensiva. Toda la zaga de Águilas se le fue encima al del Tolima y el árbitro Ferney Trujillo tuvo que repartir varias amonestaciones. Llovieron insultos y empujones entre los jugadores.

Todo apuntaba a un empate. El minuto 89 llegó con el grito de gol en la veloz transición de Águilas, que no se había acercado ni una sola vez durante el segundo tiempo. Adrián Estacio fue el que envió una pelota exacta para Wilson Morelo y el puntazo letal logró vencer a Vargas. El gol lo celebraba la visita, pero se gritaba con júbilo en Barranquilla.

El conjunto antioqueño ya estaba matemáticamente eliminado, pero los tres puntos lo confirmaban como clasificado a la Copa Libertadores 2024. Además, mantenía viva la ilusión del Junior, que iba a tener la chance de acercarse al puntaje del Tolima en el siguiente turno.