América, una bomba de tiempo

• América de Cali: lo que comienza con el pie izquierdo no tiene arreglo
• Continúan las salidas en Nacional: tres jugadores no seguirían para la próxima temporada

Son días de incertidumbre los que se viven en este momento en el América de Cali. Con la temprana eliminación todo el proyecto que armaron los Gómez Giraldo, a comienzo de año, se fue al carajo. Un proyecto pegado con babas que arrancó de la peor manera después de haber sacado a Lucas González para sumar a César Farías tras el ‘no’ (que todos sabíamos) de Ricardo Gareca.

El equipo se entrena con normalidad pero en un par de meses se vencen los meses de contratos de Gastón Sauro, Víctor Ibarbo y Edwin Cardona. Del último era del que más se esperaba y quedó en deuda con el América. Fue un poco más de lo que mostró en Racing pero estuvo muy lejos de lo que conoció el país de él. El argentino, uno más; pasó sin pena ni gloria. Por el lado de Víctor Ibarbo, llegó lesionado, sin minutos y ya se sabía lo que iba a pasar. Tuvo momentos buenos, pero nada de lo que se vio de él en Nacional, Europa y la Selección Colombia. A esos tres, seguramente, se sumarán más nombres.

Por otro lado, en el programa Saque Largo de Win Sports, el panelista Julián Céspedes contó al aire que un referente del equipo le dijo lo siguiente: “Herramientas hay, que no se sepan utilizar es diferente. Ese man (Farías) nos tiene reventados, no sabe qué quiere, no se entiende con su misma gente. Ya pedimos una reunión con Tulio”.

En un diálogo con Semana, César Farías respondió a esas declaraciones en su contra: “Lo que está mal es la difamación, ante eso guardaré silencio. Si fuera verdad, tendrían miles de pruebas”. Y añadió: “Farías es un gamín, ‘malas pulgas’, malgeniado, atropellador, de todo, mala gente, ese tipo. Por eso se debe ir del América el señor Farías. Uno entiende que digan en los malos resultados que es un mal entrenador, que no sabe de fútbol. Pero aquí, yo no fui el que eligió los jugadores. Estoy sorprendido. Yo no participo en eso… para pelear se necesitan dos y no estoy dispuesto a eso”.

Falta un partido en Manizales, América será juez y actor de segundo plano que puede transformase en villano. Una vez se pite el final del cotejo en el Eje Cafetero, ya debe haber una decisión en el escritorio de Marcela Gómez. La decisión que todos esperan. César Farías no debe seguir en América. No se puede rescatar nada de este proyecto que duró poco y que llegó “de rebote” (todos sabemos que no, pero creamos que sí). De ser ciertas las agresiones, estaríamos frente a otro capítulo oscuro de su vida. Otro más. Un tipo de carácter fuerte y que tiene el ego en las nubes.

Otro semestre más que se le esfuma al América, adiós de pelear por un título y también eliminado de la Copa Sudamericana ante Alianza FC. Una deuda más para esta directiva sin brújula. Que le cuesta muchísimo encontrar el norte. Que por momentos pareciera que no saben nada de este deporte. Que el dueño escuda sus decisiones en su hija y la manda al frente sin importarle nada.