Bucaramanga y Santa Fe, listos para el “primer sorbo” de una final imborrable
- Pablo Peirano confirma una baja en Santa Fe antes de la final: “Tiene una contractura grande”
- Rafael Dudamel: “Deseamos hacer inolvidable esta final para Bucaramanga”
Llegó la hora de la verdad. Dicen que en Bucaramanga, cuando se llegó a la primera final en 1997, no se llegó al mismo nivel de emoción que ahora, a pocas horas de disputarse el capítulo de ida en el Estadio Alfonso López de la capital santandereana. En la noche del viernes, miles de hinchas salieron a las calles a protagonizar una caravana emblemática, haciendo sentir la gran ilusión común de portar la primera estrella en el escudo.
En efecto, a partir de las 7:30 p.m. (hora local) y con el arbitraje de Wilmar Roldán, una multitud de corazones latirán más fuerte en los alrededores del Alfonso López para ese duelo, ratificando la presencia de dos grandes oncenos de excepcional semestre. Tanto Bucaramanga como Independiente Santa Fe, sin duda, tienen enormes méritos para llegar a la instancia clave del primer semestre.
Bucaramanga arrastra la ilusión de un departamento entero
Dicho lo anterior, el ‘Leopardo’ está con el ánimo al cien. Rafael Dudamel hizo sentir su rol de líder en la rueda de prensa, previa a ese cotejo de ida. Todos han esperado una larguísima semana para ver cómo será el desenlace de esta novela, en la que según el técnico venezolano, se confía en el arduo trabajo para conseguir la hazaña.
“Ha sido un semestre de principio a fin muy exigente en diferentes etapas. Muchas experiencias que nos han permitido crecer y llegar maduros como equipo a esta instancia. La final, la estrella, 180 minutos, la estamos viviendo con la adrenalina con que se viven este tipo de partidos, sin dejar de ultimar detalles, estar atentos a que cada jugador esté tranquilo”, manifestó el timonel venezolano, campeón con el Deportivo Cali en 2021.
El capitán, Jefferson Mena, sorprendió al afirmar que desde el primer día se habían confirmado en hacer historia y quedar grabados para siempre en la memoria del aficionado, quien ha tenido que pasar por durísimos golpes para estar disfrutando los gloriosos.
“No es fácil llegar a la final. Nosotros lo soñamos desde el principio y está en nuestras manos lograrlo, darles esa alegría a los hinchas y va a ser inolvidable. Nos van a recordar por muchos años”, subrayó Mena.
Santa Fe, a ratificar el ‘campañón’ del semestre
Para nadie es un secreto que el ‘Cardenal’ ha demostrado un gran nivel en el primer semestre, pasando del subsuelo al cielo en materia futbolística. Con un fútbol sencillo, práctico, firme en lo defensivo y sumándole destellos de contundencia, Pablo Peirano ha hecho méritos con un plantel muy bien confeccionado. Los refuerzos cayeron como anillo al dedo, complementándose con un goleador de la talla de Hugo Rodallega.
El liderato sólido del grupo B, junto a un invicto importante en esa instancia semifinal y los niveles potables de casi toda la plantilla en cuestión de nombres importantes, demuestran el porqué Santa Fe puede llegar al doble dígito de trofeos ligueros en toda su historia. Al menos mil hinchas acompañarán al cuadro capitalino y le harán sentir que no juega en soledad.
“Sabemos que vamos a enfrentar a una defensa fuerte y organizada. No vamos a cambiar nuestra manera de jugar, pero sí haremos movimientos que abran espacios para atacar”, expresó Peirano en la última charla con los medios, previo a la finalísima de ida, teniendo en cuenta la baja de Facundo Agüero por una contractura importante.
Hugo Rodallega advirtió que van a pelear de “tú a tú” para lograr la ventaja inicial en Bucaramanga. “Será un partido complicado y va a ser campeón el que se equivoque menos y haga las cosas de mejor manera. Respetamos el deseo de querer tener la primera estrella, pero iremos a muerte para poner la 10 de Santa Fe”, aseguró.
Por lo pronto, está claro que se vendrán días largos para ambas hinchadas. La definición del título otorgará el primer cupo del año a la próxima Copa Libertadores de 2025 en su fase de grupos, por lo que será un factor motivacional para ambas escuadras de tocar la gloria y, en el camino, irse preparando rumbo a una exitoso desempeño fuera del país.