Fabry Castro es adrenalina para un letargo: las claves del triunfo de Bucaramanga sobre Atlético Nacional
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Poco a poco, el fútbol colombiano se va poniendo al día en el calendario y se va viendo un panorama más claro de la situación en la tabla de posiciones. Bucaramanga, vigente campeón, recibió a Atlético Nacional en el transcurso de la fecha 11 de la Liga BetPlay Dimayor 2024-II.
El Leopardo se presentaba ante su gente con cierta urgencia de triunfo para acercarse al grupo de parciales clasificados a los cuadrangulares semifinales, mientras que el Verdolaga se intenta acoplar a la idea de Efraín Juárez y llegaba con el ambiente un tanto alborotado por los recientes hechos de indisciplina de varios jugadores.
Intenso, pero carente
Se vio mucha intensidad y vértigo desde el arranque, pero las ocasiones claras no aparecían. La dos grandes oportunidades para abrir el marcador en el primer tiempo fueron de Esneyder Mena. Primero, legó al mano a mano para disparar desviado tras un gran pase de Fabián Sambueza y causó el suspiro en las tribunas. Luego, remató de frente y le quemó las mano a Harlen Castillo.
Mucha lucha
Las ganas de ir al frente empezaron a tomar otro rumbo. El juego fuerte apareció y se vieron varios golpes pasados de fuerza que empezaron a quitarle ritmo al partido. Leonardo Flores se salvó de ser expulsado, pues ya tenía tarjeta amarilla y fue a levantar a Pablo Ceppelini desde atrás en una clara acción para amonestación. El árbitro José Ortiz fue piadoso, pero equivocado al no proceder como correspondía.
Rafael Dudamel supo que no podía dejar ese riesgo en cancha y envió a Aldaír Zárate para el complemento. Si las emociones habían estado escasas, ahora el partido era un somnífero. Más allá de una cantidad de faltas innumerables, no había nada para resaltar.
Casi que no…
Michael Rangel ingresó para remplazar a Andrés Ponce e intentar al mejor en ataque. Como si la sola presencia de atacante en cancha hubiese traído los ánimos de celebración, cayó el tan ansiado gol. Fue en centro desde el tiro libre que Fabry Castro quedó solo al borde del área chica y puso la cabeza para poner a ganar a los locales al minuto 71.
Eso fue suficiente para que Bucaramanga mantuviera la ventaja y se adjudicara los tres puntos que lo dejan al borde de la zona de clasificación. En el último minuto de la adición, Felipe Aguirre estuvo cerca de empatar, pero Aldaír Quintana salvó con una atajada espectacular. Atlético Nacional, que está dentro del grupo de privilegio, sigue sin convencer con sus formas escasas y poca claridad hacia el arco rival.