Junior se toma en serio el ‘Vía Crucis’ y salva tres puntos de oro: las claves del triunfo ante La Equidad
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El contexto servía en la víspera un partidazo. Junior y La Equidad se encontraban en el Estadio Metropolitano de Barranquilla para dirimir una batalla por acercarse a la clasificación a cuadrangulares. Si bien ambos llegaron dentro del grupo de los ocho que avanzarán a la siguiente fase, ningún resultado los iba a asegurar, así que tocaba sumar para no arriesgarse a terminar esta instancia con estrés.
Trepar el muro…
Como era de esperarse, la iniciativa con la pelota fue del Tiburón. Sin embargo, a pesar de dominar la posesión, se encontró a un cuadro bogotano bien concentrado en defensa y que se convirtió en un muro difícil de derribar a la hora de entrar al área. Parecía que iba a ser un tema de mucha paciencia.
No obstante, todo cambió repentinamente en un tiro de esquina. Dídier Moreno estaba merodeando en el área y tuvo la fortuna de cazar un rebote en el área chica, cuando toda la zaga visitante lo había perdido de vista a él. La felicidad de los hinchas por abrir el marcador al minuto 20 fue sonora.
… Y caerse de espaldas
No pasaron ni dos minutos desde la anotación, cuando se decretó penalti por falta de Martín Payares sobre Déiber Caicedo. Carlos Bacca ejecutó con pierna derecha y Washington Ortega le adivinó el disparo con un atajadón que frustró otra celebración del Tiburón. La intervención del portero de La Equidad iba a ser importantísima por lo que venía. Junior desperdiciaba el aumento de la ventaja en un momento clave.
Sobre la media hora de juego, Jermein Peña cometió un acto infantil como los que ya lo catalogan como un jugador blandito de mente. Le dio un manotazo en la cabeza a Felipe Acosta y se fue expulsado, luego de que el VAR invitara al árbitro Luis Delgado a la revisión. El defensor no solamente fue irresponsable en la acción descrita, sino que se retiró pateando cosas y expresando improperios contra el banquillo de La Equidad.
Arturo Reyes se vio obligado a mover el equipo. Hómer Martínez entró para reforzar la defensa y el sacrificado fue Déiber Caicedo. El atacante se fue un tanto contrariado por la decisión del director técnico, pues estaba teniendo una buena noche y José Enamorado parecía el llamado a salir sustituido. La Equidad se fue con todo a buscar el empate, pero no tuvo buena puntería, más allá de un tiro libre de Johan Rojas que fue bien atajado por Santiago Mele.
Saber sufrir
Alexis García tenía que aprovechar la mayoría de efectivos en campo y ordenó dos cambios de corte ofensivo. Léiner Escalante y Bréiner Agrón entraron a buscar más intensidad en ataque. Por su parte, Junior tuvo el ingreso de Marco Pérez en sustitución de Carlos Bacca.
Hablando de aquel muro del inicio del partido, el Tiburón tuvo que recoger los pedazos y armar el suyo para defender la ventaja. El cuadro Asegurador empezó a tocar la pelota con dinamismo. Escalante tuvo una gran oportunidad tras un tiro libre en el que encontró el rebote, pero Mele se estiró con todo. El portero siguió con su show de atajadas en un remate lejano de Jonathan Caicedo.
Ciertamente, el partido era un sufrimiento para Junior. Estaba haciendo maravilla para cubrir los espacios en el área y aguantar el embate ofensivo de la visita. El mayor susto de los asistentes barranquilleros fue en un cabezazo de José David Lloreda que se estrelló contra el palo en los últimos minutos de juego.
Aguantando como pudo en el final de encuentro, la gran figura fue Mele. Junior se queda con puntos relevantes que lo acercan a la clasificación, mientras que La Equidad ya cuenta su tercera derrota en línea y va a tener que despertar pronto para no salir del grupo de parciales clasificados.