Millonarios gana y reafirma que el partido contra Santa Fe es un derbi, no un clásico: las claves del triunfo Embajador

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Leonardo Castro celebra el gol. - Vizzor Image.
Leonardo Castro celebra el gol. – Vizzor Image.

El partido más atractivo de la fecha 15 en la Liga BetPlay Dimayor 2024-II fue entre Santa Fe y Millonarios. Era el derbi capitalino en su edición 316. Sin embargo, eso: un derbi, porque este duelo dejó de ser clásico hace mucho tiempo ante la brecha impresionante en los registros a favor del Embajador. Son, al menos, 10 años de ventaja en victorias. Es una paternidad marcada y creciente.

Si bien el cuadro Cardenal ya llegaba a este duelo con los puntos necesarios para acceder a los cuadrangulares semifinales, su motivación estaba en mantenerse en el primer o segundo lugar de la tabla de posiciones para obtener la ventaja deportiva en caso de empate en la siguiente fase. Por su parte, el conjunto albiazul estaba a cinco puntos de su tiquete.

Fogosidad

El partido inició picante porque Julián Millán fue a encarar a Émerson Córdoba por un amague de patada y luego simuló un cabezazo en el rostro. Eso provocó una reacción acalorada en el banquillo de Santa Fe, que era el que estaba más cerca. El árbitro solucionó con amarilla para el extremo derecho albiazul y para Jhojan Torres, que estaba como suplente y se metió donde no tenía que estar.

La primera gran oportunidad llegó para Millonarios en un contraataque tras un tiro de esquina a favor del equipo que oficiaba como local. El fondo albirrojo quedó muy mal ubicado en el retroceso y Daniel Mantilla llegó al área para quemarle las manos Andrés Mosquera. El rebote quedó para Leonardo Castro, pero todo se invalidó porque el delantero estaba en fuera de juego. A pesar de que hubo gran intensidad, fue la única ocasión en el primer tiempo.

¡Montero es el segundo portero de la Selección!

Estaba verse qué hacían Pablo Peirano y Alberto Gamero de cara al complemento, pues ambos equipos estaban haciendo un partido muy ordenado en defensa, pero estaba fallando mucho la generación ofensiva. Eso sí, el estratega Cardenal iba a tener que hacer algo para impedir que aquella ocasión peligrosa de la primera mitad se repitiera. Intentó entonces enviando al campo a Edwar López y a Jordy Monroy para remplazar a Juan Pablo Zuluaga y a Elvis Perlaza.

Santa Fe salió volcado al ataque y estuvo realmente cerca de conseguir premio. Santiago Mosquera remató y el rebote quedó para el disparo a quemarropa a Hugo Rodallega. La respuesta de Álvaro Montero fue monumental en ambas acciones, demostrando por qué es el segundo portero de la Selección Colombia.

Que pase el goleador

Las dos salvadas del portero de Millonarios iban a ser muy importantes con lo que venía. Émerson Córdoba lanzó un pase largo y Castro le ganó la posición a Millán para quedar de frente al golero. El atacante tenía la pelota en el área exacta para meter una volea espectacular y abrió así la cuenta al minuto 54. La tribuna norte, abarrotada por hinchas del Embajador, explotó de emoción.

Ahora le correspondía al albiazul manejar con inteligencia la anunciada embestida que se venía. Juan Pablo Vargas, que tuvo una destacada actuación general, pecó de confianza en la salida y le regaló la pelota a López en una zona sensible. El pase fue para Hugo Rodallega, pero llegó muy incómodo a definir desviado.

Gestión de emociones

El partido era muy vibrante para ese punto y las pulsaciones iban a mil. Lo que en Millonarios podía ser algo de inseguridad, en Santa Fe se podía convertir en impotencia. Rodallega se salvó de ser expulsado al darle un cabezazo a Sergio Mosquera cuando la pelota no estaba en juego en el tiro de esquina y solamente vio la tarjeta amarilla.

Los ingresos de Jáder Valencia y Daniel Ruiz en el Embajador fueron muy importantes para que el Embajador supiera darle manejo a la pelota en zonas de poco compromiso e intentara uno que otro avance. La urgencia del Cardenal lo llevó a tomar decisiones afanadas en el último tercio.

Andrés Llinás entró para reforzar la línea defensiva y supo cerrar el partido sin sufrir de más. En el tiempo de adición y para que no quedaran dudas de su capacidad, Montero volvió a salvar un remate tremendo de Ómar Albornoz y un cabezazo de Agustín Rodríguez. Millonarios llegó a 126 victorias sobre Santa Fe, contando 106 empates y 84 derrotas en la cuenta histórica por todas las competencias. ¡No es un clásico, es un derbi!

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