Una obra de arte de Andrés Ibargüen noquea al Boyacá Chicó
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Insistir, persistir y nunca desistir. No hay una frase que describa el triunfo de Deportivo Pereira sobre Boyacá Chicó, este martes en la noche, en el estadio Hernán Ramírez Villegas. Por tierra, por aire; dentro del área o fuera de ella. Desgastó todas las vías el elenco de Luis Fernando Suárez, pero urgía un truco de magia, y el encargado de sacar el as bajo la manga fue Andrés Ibargüen, con una joya que no pasará de moda.
Más de tres meses tuvieron que pasar para que Pereira le diera una alegría a su afición. Desde aquel triunfo ante Bucaramanga, el pasado 4 de mayo, el cuadro matecaña no sabía lo que era conjugar el verbo ganar en su hogar. Sin embargo, no hay racha eterna, y pese que ante Chicó comenzaron a ‘bailar’ algunos fantasmas por las gradas, Ibargüen los espantó con una obra de arte.
Se juntaron los que saben. Carlos Darwin se puso el traje de asistidor y abrió a la izquierda para Ibargüen, que se sacó de encima su marca, chutó desde el balcón y la clavó en el ángulo, dejando sin opciones a un inspirado Rogerio Caicedo, que era un ‘antimisil’, pero que absolutamente nada pudo hacer ante semejante remate. Un grito que retumbó en toda la capital risaraldense.
Tras este triunfo, el Pereira vuelve a meterse en el grupo de privilegiados y queda a tres puntos de la cima, por su parte, el Chicó vive sus últimas horas en la máxima categoría, ya que su descenso está a sólo días de hacerse oficial.