Iván René Valenciano habla de su vida problemática: “La fábrica de licores completa me la he tomado”
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A pesar de haber sido un goleador extraordinario y renombre en el fútbol, Iván René Valenciano ha tenido una vida complicada. La indisciplina y el poco autocontrol llevaron al artillero a estar en inmerso en diversos escándalos de los que hoy habla abiertamente, Con ocasión del lanzamiento de su libro ‘El gol de la gloria’, el exfutbolista tuvo un diálogo con Semana en el que contó varias experiencias sin muchos tapujos.
Comenzó hablando del asunto del dinero y cómo cambia la manera de pensar: “Te daña la cabeza desde todo punto de vista. Primero porque te crees el dueño del mundo. Siempre he sido de las personas que, más allá de cualquier cosa, el dinero para mí nunca fue la prioridad o fundamental. Disfrutaba de comprar las cosas, que mi familia estuviera bien, de poder comer bien. Por eso muchas veces la gente cree que todo lo que perdí me da duro. Me he caído y me he vuelto a levantar. Cuando me preguntan si extraño el fútbol, para nada. Extraño es el sueldo del fútbol“.
A pesar de tener fama de alcohólico, Valenciano asegura que no bebía antes de los partidos: “Solo una vez jugué enguayabado. Fue un 18 de marzo que estaba cumpliendo años, jugábamos en Barrancabermeja. El día anterior me fui a una discoteca, me acosté a las 5 de la mañana y jugamos a las 3:30 de la tarde. No fui ni siquiera a almorzar, llegué directamente al estadio y el profesor me puso de suplente. Ese día metí gol y ganamos 2 a 1. De resto, ni cuando estuve en Junior, Italia o a nivel profesional en otros países tuve ese tipo de inconvenientes. Siempre tomaba trago después de los partidos. Es más, cuando se acababan los partidos, en la concentración, metía mis frías, mis botellas de whisky y me tomaba mis tragos. De resto nunca me volé a tomar“.
Y hace mayor énfasis en el asunto de los desórdenes alimenticios: “Tomo trago desde los 16 años que tuve esa posibilidad de tomarme un aguardiente. También la comida, eso no me podía faltar por el tráfico de cuchara que pasamos. Mi hermano pasó de ser flaco a gordo. Cuando generé ingresos, comía y comía. Nunca le presté atención que al porcentaje de grasa, que estaba gordo. Si me tenían que hacer la pantaloneta y la camiseta XXL me las hacían. Los nutricionistas no podían conmigo, me mandaban que manzana o pera y yo, mandaba por una pizza, hamburguesa y lo que fuera para la habitación“, reconoce.
Recordó algún accidente de tránsito que tuvo bajo la influencia del alcohol: “Hay que reconocer los errores, no se puede ocultar el sol con una mano. No me puedo echar mentiras yo mismo. Cuando me entregaron mi primer carro, le mandé a poner las llantas y a polarizarlo. Mientras le hacían eso, me puse a tomar los tragos, una botella de whisky y cuando me entregaron el carro, iba bajando por la 51 con 84 en Barranquilla, no sé en qué momento estaba metido en una cuneta y me bajé del carro y dije no le pasó nada. Cogí un taxi y me fui para mi casa. Le dije a mi papá que lo fuera a buscar porque lo había rayado, mentira que me lo mostraron al día siguiente, le había arrancado una llanta en la parte de atrás y estaba todo reventado de un costado. Lo arreglaron y a los 15 días eran los Juegos Nacionales, yo llevaba la antorcha. El día anterior tomé. Me pidieron correr con la antorcha y les dije que no, porque me podía morir. Salí de la inauguración a mi casa y me volví a chocar, lo metí a un bus por detrás. Lo volví nada, el chofer se bajó, le dije que fuera a mi casa por unas boletas para ir al estadio el domingo. Así solucioné”.
No obstante, Valenciano afirma tajantemente que nunca fue consumidor de droga: “Vicio, nunca. No he metido droga. Lo único, es medicamento siquiátrico por el insomnio. De resto, soy mamador de ron todo lo que quieras, la fábrica de licores completa me la he tomado sin ningún tipo de inconveniente. Eso sí lo reconozco. La gente cree que me ofende por decirme borrachón. Se han inventado que me dieron $50,000 barras para perico. Jamás. Cuando jugaba fútbol hacían prueba de doping y nunca tuve un escándalo en ese sentido. Más bien por el ron, el chicharrón, comer pizza, hamburguesa”, concluyó.