Ghost of Tsushima es uno de los juegos más apreciados, tanto por los jugadores como por la crítica en los últimos años. El cariño que se le tiene al juego es tal que cuando un santuario en la verdadera isla de Tsushima fue destruido debido a un tifón propio de la zona, los fans del juego corrieron a atender el llamado de los cuidadores.
Los guardianes del santuario había iniciado una campaña de crowdfunding para su reconstrucción, con lo que buscarían donativos. Esto, claro, se esperaba que llegara a los ojos de residentes japoneses; es más, se esperaba que únicamente tuviera impacto en la localidad, como suele suceder en casos así. Pero con lo que no contaba la isla de Tsushima era con el fervor de los gamers.
La campaña de crowdfunding no sólo llegó a la meta, sino que se superó con creses. Los gamers reunieron más de $260,000 dólares, de una meta de apenas $50,000 dólares. Con esto, no solamente se restauró el recinto sagrado, sino que se optó por incluir el nombre de varios donadores inscritos en piedra en un monumento junto al santuario shinto.
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