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The Teal Mask, la primera parte del DLC de Pokémon Scarlet & Violet, The Hidden Treasure of Area Zero, está inspirado en los matsuri japoneses, festivales tradicionales que varían de acuerdo con la época y la región. Eso sí, todo el tema, ambiente y hasta nuevos Pokémon parecen estar inspirados directamente en el folklore japonés, desde las máscaras del teatro Noh hasta el cuento tradicional Momotaro Monogatari.
Ahora, la revelación de un nuevo Pokémon va de la mano con estos temas y ambiente, Poltchageist, un monstruo de bolsillo inspirado en el matcha, el kintsugi y los tsukumogami.
¿Qué es Poltchageist?
Su nombre revela mucho sobre el Pokémon. Se compone de Poltergeist, espíritus chocarreros de la tradición europea; particularmente, de origen germánico. La otra parte es matcha, el té verde japonés hecho con hojas tiernas y cultivado a la sombra, una bebida especial importancia para la tradición nipona. La composición de su nombre, además, nos revela su relación con Polteageist y Sinistea, otros Pokémon basados en té que hicieron su debut de forma apropiada en la región Galar, inspirada en el Reino Unido, famoso también por su té.
De hecho, mientras que en varias partes del mundo utilizamos la palabra té para referirnos a la bebida preparada a base de hojas de la planta de té, en la otra mitad del mundo se utiliza la palabra cha o algún otro derivado. Reza un viejo adagio: si es por tierra, es cha; si es por mar, es té, para referirse a la diseminación de los nombres para la bebida, dependiendo de la ruta de comercio que siguió.
En el caso particular del matcha, tiene esa misma etimología. Su nombre se compone de Ma y Cha, literalmente, té en polvo.
Orígenes culturales de Poltchageist
Como podemos ver en el tráiler, Poltchageist nació a partir de sentimientos negativos y del olvido, un tema recurrente para los yokai, espíritus chocarreros de la tradición japonesa. Pero, en concreto, pertenecería a un tipo particular de yokai, los tsukumogami. Esta clase de yokai proviene de objetos viejos e instrumentos de trabajo que han sido descuidados, olvidados o tratados sin respeto. De hecho, para evitar la creación de tsukumogami, en santuarios japoneses se llevan a cabo ceremonias de “retiro” de artículos que ya han servido su propósito, a los que se les purifica y agradece su servicio.
Por último, debemos hablar del frasco roto en el que habita o es parte del cuerpo de Poltchageist. Y es que lejos de ser desechado por ese hecho, el frasco es reparado y la fisura es aún visible, pero con el distintivo color verde del matcha. Esto es equiparable a la práctica del kintsugi. Este tipo de trabajo artesanal toma platos, tazas y otros objetos de cerámica y los repara al unir sus partes rotas con oro. De este modo, la fisura misma pasa a formar parte del nuevo diseño y, lejos de ocultar la ruptura, la resalta, pero también la dota de nuevo valor y significado. En este sentido, el punto de ruptura vuelve al objeto único, que ejemplifica también la filosofía de tratar con respeto los objetos y no simplemente desecharlos una vez que han sido dañados.