Parece que un juego de la saga de Zelda se volvería a prueba de todo. Ya quedaron muy atrás los años 90, cuando la saga aún se encontraba en una etapa experimental y el público vio algunas entregas francamente malas. Ahora, a poco más de dos semanas de la llegada de Tears of the Kingdom a nuestras consolas, los primeros playtest han empezado a aparecer a lo largo de Internet y, la verdad, todos los comentarios hasta ahora son justo lo que esperábamos.
Primeras opiniones del nuevo juego de Zelda
Como todos sabemos, Breath of the Wild fue la primera experimentación real de un juego de Zelda con el formato de Mundo Abierto, lo cual lo convirtió en un éxito de ventas. En un espíritu de secuela (o tomando todo lo que funcionó excelentemente del juego anterior) el juego se siente tal cual como una continuación sin que esto sea negativo, salvo por el hecho de que, para disfrutarlo por completo, lo ideal es haber jugado Breath of the Wild antes.
¿Cómo se completa esto con la idea de re empezar todo un juego otra vez? Pues con las nuevas dinámicas de juego. En particular con la aptitud Ultrahand, que es la que te permite fabricar todo lo que necesites gracias a la nueva tecnología Zonai y los materiales que encuentres a lo largo del mundo. Más allá de los memes que resultaron de esta propuesta, genuinamente esto coloca al juego a la altura de Minecraft en tanto que las opciones de construcción son casi infinitas. Si puedes imaginarlo, podrás tenerlo.
Se habla, por ejemplo, de escudos capaces de escupir fuego, colocar explosivos en los ítems arrojadizos para aumentar el daño y fusionar una fruta eléctrica a una flecha para aumentar daño por relámpago a los enemigos impactados con el arco. Y todo ello sin tutoriales, solamente por la imaginación de los mismos jugadores de la prueba del juego.
¿Qué tiene de malo el nuevo juego de Zelda?
Estas mismas fortalezas, para algunos, se vuelven sus debilidades. Muchas de las dinámicas de fabricación de objetos no son precisamente “necesaria”. Es decir que no intervienen directamente con la historia y no necesitas experimentar el juego a través de ellas. Pero en todos los juegos de mundo abierto, y los RPG, hay siempre una necesidad de los jugadores de exprimir el juego al máximo, aunque eso signifique encontrar una forma más complicada de hacer una tarea simple. En ese caso, Tears of the Kingdom es el juego perfecto.
Y mientras que todos los juegos de la saga funcionan perfectamente como juegos en solitario, cada uno de ellos proponiendo nuevas dinámicas, lore distinto y una historia en particular, Tears of the Kingdom se vuelve el primer juego donde la narrativa depende directamente de su precuela. Pero si no jugaste Breath of the Wild, ¿de quién es culpa?
¿Tú ya estás listo para el nuevo juego de Zelda? ¿Qué esperas de él?