El Nintendo Direct de hoy nos dio un vistazo sumamente intrigante al gameplay de The Legend of Zelda Tears of the Kingdom. Ahora, el juego parece tomar elementos de dos fuentes fácilmente reconocibles: Dead Rising y Minecraft.
La durabilidad de las armas fue uno de los mayores puntos de contención en Breath of the Wild. En vez de simplemente eliminarlo, Nintendo optó por algo mucho más interesante: doblar la profundidad del sistema de creación de armas y, como en Dead Rising, ahora nos permite fusionar armas entre sí o armas con recursos de la naturaleza, para crear armas hechizas más poderosas, útiles, duraderas y creativas. Esto, por supuesto, es una invitación abierta a que los jugadores exploren todas las posibilidades y que buscan combinaciones que, de primera intención, podrían sonar inverosímiles, pero que terminarán siendo reveladoras. Esto no aplica sólo a las armas, sino a las municiones, como vimos con las flechas, así como a los escudos, que podrán ofrecer más estrategias y modos de combate. Claro que no esperamos que nos entreguen niveles de absurdo como las armas de Dead Rising, pero tampoco podemos descartarlo, debido a que los jugadores de Breath of the Wild encontraron maneras de explotar las mecánicas de formas que, posiblemente, no estaban consideradas por el equipo de desarrollo.
El siguiente elemento de juego que vimos reflejado de manera prominente fue la fabricación de vehículos. Al tomar prestada una página del sistema de fabricación de Minecraft, el juego permite tomar recursos naturales y mezclarlos de tal forma que generen mecanismos lógicos operantes con las reglas físicas del mundo. De ahí tenemos que los vehículos que habíamos conocido en los tráileres no eran realmente parte del juego en sí, sino que cada jugador podrá crear los vehículos que más le acomoden de la forma que su creatividad le permita. Y no podemos esperar para ver las aberraciones vehiculares estilo Mad Max recorriendo las planicies de Hyrule.