El Leverkusen prolonga su magnífica racha: triunfazo ante un Friburgo que le plantó cara en la Bundesliga

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Bayer Leverkusen derrotó a Friburgo (REUTERS)

El Bayer Leverkusen sufrió un poco más de lo normal en su última parada por la Bundesliga, pero alcanzó a ganar con lo justo frente a un Friburgo que suele complicar a los equipos poderosos. Luego de un electrizante trámite del juego, los dirigidos por Xabi Alonso vencieron a los ‘buitres’ por 2 a 3 y por ello conservan la distancia de 10 puntos en la tabla de posiciones con el Bayern Munich, su letal perseguidor.

En medio de la presión intensa del Friburgo en el arranque del juego, los visitantes pisaron fuerte al primer minuto con un gol de Florian Wirtz, la gran joya de los líderes teutones, quien cortó la línea de presión y recibió un pase de Alejandro Grimaldo. Wirtz condujo al área y remató con pierna derecha al ángulo superior izquierdo del golero rival.

Sin embargo, la localía no se dio por vencida y siguió en la misma tónica de jugar al error y presionar líneas de pase. Ritsu Doan, extremo japonés, igualó el cotejo sobre los 10 minutos tras una jugada colectiva. En una de las primeras tenencias largas del anfitrión, se asoció en una pared con Lucas Höhler y definió frente a las piernas de dos defensores.

El partido era de tratar con pinzas, dado que Friburgo mostraba sus armas y el Leverkusen, sin desesperarse, movía el balón de lado a lado para buscar algún hueco en la defensa rival. Tenía que pasar algún error individual, y en efecto, se equivocó el arquero Noah Atubolu, quien dejó un rebote vivo tras un disparo de Wirtz. Esto lo aprovechó el checo Adam Hložek para invocar las redes a los 39 minutos, esto luego de que Patrick Shick le asistiera en ese balón suelto.

Para alargar la diferencia, en un segundo episodio de tensa calma, Patrick Shick no desperdició su oportunidad y alargó la diferencia a servicio de ‘Die Werkself’. En una posesión breve, finalizada por Jeremie Frimpong en zona de ataque, el lateral tiró un enorme centro para la llegada de Shick, que impactó de primera intención con pierna zurda. El balón pegó en el poste derecho del arco rival, pero alcanzó a meterse a los 52 minutos.

El duelo parecía liquidado, hasta que Yannik Keitel de Friburgo le puso rebeldía al asunto tras un rebote vivo que dejó el golero Lukáš Hrádecký. El volante estrechó la ventaja rival a los 78 minutos y allí intentó tomar las riendas el equipo de casa, con más ganas que fútbol.

A fin de cuentas, enorme triunfo para el Bayer Leverkusen, que llega a los 70 puntos en 26 partidos jugados y prolonga su invicto en lo corrido de la temporada. Sin duda, está a otro peldaño más de llevarse la primera Bundesliga en la historia, pues nadie parece frenarlo.

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