Luego de que el pasado 12 abril se diera a conocer que Sadio Mané había agredido a su compañero de equipo Leroy Sané, al finalizar el duelo de ida de los cuartos de final de la Champions League, donde sucumbieron en casa ante el Manchester City, el futbolista senegalés rompió el silencio y habló sobre lo ocurrido.
“Este tipo de cosas pueden pasar. Ocurrió y pudimos solucionarlo. Es bueno resolver problemas, pero no de esta manera. Ya es pasado. Intentaremos luchar juntos para ayudar al club a conseguir sus objetivos la próxima temporada”, indicó Mané en la televisión de su país ‘2sTV’.
De acuerdo a información del medio alemán Bild, Mané debe su continuidad en el equipo bávaro gracias a que el futbolista alemán intercedió a su favor ante la directiva que pretendía desvincularlo del equipo. En ese entonces, el senegalés recibió una multa de $500.000 euros, unos $545,000 dólares, y fue suspendido por un partido.
Por otra parte, Mané habló sobre lo complicado que fue la temporada, debido a las lesiones que sufrió, mismas que lo marginaron de la Copa del Mundo de Qatar.
“Ahora estoy de vacaciones con la familia. Ha sido una temporada muy complicada, da la casualidad. No fue una sorpresa, esperaba que las cosas fueran un poco complicadas. Es normal”.
Finalmente, Mané, quien recibió ofertas de futbol árabe, descartó una posible salida este verano de la Bundesliga.
“Seguiré, si Dios quiere. Me gustan los desafíos y el Bayern es un desafío. Depende de mí hacer lo que sea para enfrentarlos”.