Kylian Mbappé entiende las críticas en torno a su desempeño en el Real Madrid: “Ya no lo podía hacer peor”

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Después de superar un bajón de rendimiento y llegar a liderar el ataque del Real Madrid, Kylian Mbappé (26 años) salió ante los medios por primera vez desde que se viste de blanco para explicar con detalle y en muy buen español por todo lo que ha pasado estos meses. Un mensaje por encima del resto: asume su culpa de no haber estado al nivel esperado en sus primeros pasos en el club.

“Estar aquí es siempre un sueño. Cada vez que tengo la oportunidad de jugar aquí, soy feliz. Incluso cuando no jugaba bien, lo estaba. Era mi culpa, de nadie más. Y ahora estoy mejor. Intentando aprender la cultura española, un poco diferente de la francesa, pero en ello estoy. Y bien. Me gusta mi vida”, afirmó.

Dijo sin tapujos que había vivido un problema mental. Más concretamente, aseguró que “pensaba demasiado” cuando jugaba. “El proceso ha sido más mental, simplemente. Estaba bien físicamente y con el equipo y yo tenía que hacer más y lo sabía. No he venido a Madrid para jugar mal. Ha cambiado eso y ahora hay que seguir porque en el Madrid tenemos que jugar bien siempre”.

“Yo pensaba mucho. Demasiado. Cómo hacer esto, cómo moverme… y cuando piensas tanto, no juegas bien”, añadió. Un partido lo cambió todo: la derrota contra el Athletic. “Siempre quiero dar más, aportar más. Y cuando ves que no lo haces, duele. Yo sabía que esto podía pasar… Y en Bilbao supe que ya no lo podía hacer peor. Que sólo podía mejorar. Esa fue la cuestión”.

No se esconde ante las críticas. Al contrario, la entiende desde su posición. “Estoy muy tranquilo. Cuando eres un jugador como yo con todas las cosas se esperaban de mí, es normal. Esto es el mundo del fútbol. Tienes que estar tranquilo y centrado en tu juego. Yo sabía que podía cambiar la situación y estoy muy feliz por ello”.

También abraza la exigencia del Bernabéu, empezando por los pitos ante el Celta. “Soy el tipo de jugador que necesita esta presión. El sentir que siempre tienes que dar más. Ante el Celta hubo pitos… pero es normal en un club como el Madrid. Hay que ganar siempre y si no ganas la Supercopa, puede haber pitos. Es normal. Fue difícil la noche del Celta, pero hemos ido a más, jugando con personalidad, cambiando situaciones. Y esto es lo que quieren los madridistas: jugar bien y ganar partidos”.

Explicó que no ganar la Supercopa fue un bajón para el vestuario. “Fue una semana muy triste. Perder una final contra un rival. En el avión fue muy triste, pero con la sensación de que queda mucho por hacer.

También aprovechó para hablar de la selección francesa y todo el revuelo que han creado las últimas convocatorias en las que Deschamps no lo ha incluido. “Con la selección no pasa nada. Francia es así y no puedo cambiar lo que pasa allí. Tengo ganas de volver en marzo; mi amor por la selección no ha cambiado. Pero, por ahora, solo pienso en el Madrid. En dar mi mejor fútbol”.

Con información de Relevo

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