Un terrible error de Gazzaniga hunde al Girona en su debut en la Champions ante el PSG

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El Girona estaba a segundos de salir con un punto del Parque de los Príncipes. Una resistencia loable del equipo sensación de LaLiga en la temporada anterior, que estaba a segundos de llegar al 90′ con la malla invicta en el primer partido de su historia en la Champions, pero Gazzaniga cometió un terrible error a instantes del tiempo cumplido que le dio los tres puntos al PSG. 1-0 por comerse un centro raso, ligeramente desviado, pero que no iba a generar nada. Un cruel desenlace para el equipo de Míchel.

Cuando uno de un 26 a 3 en remates, pensaría que era una absoluta injusticia de los dioses del fútbol que el PSG no tuviera la ventaja pero el tema es que casi ninguno fue al arco (solo 5). El Girona no mostró la versión vertical y valiente que le dio su sitio en esta Liga de Campeones, ya que poco inquietó el arco de Safónov, titular debido a la baja por paternidad de Donnarumma.

Las ocasiones del PSG en la primera parte llegaron durante el primer cuarto de hora. Barcola llegó tarde a la cita, Krejci se cruzó en un remate de Zaïre-Emery, Asensio cruzó de más un disparo y luego se calmaron las aguas. Y sí, como habrán notado, no mencionamos al portero visitante porque no es que haya sido requerido.

El Girona casi sorprende al PSG con un gol de vestidor al volver de los vestuarios, con un cabezazo de Stuani que exigió al máximo a Safónov, y casi en la siguiente jugada, Dembélé hizo una carrera en solitario en 40 metros tras un saque de banda, pero se durmió y permitió que Krejci le robara el mandado por la espalda antes de disparar. Luego el ex Barcelona un tiro exigió el vuelo de Gazzaniga.

Kolo Muani, el primer cambio de Luis Enrique tras la lesión de Asensio en la primera parte, las tuvo de mil maneras y todas las erró. Achraf estrelló una en el área ante el achique del portero. Parecía que iba a ser una de esas noches, en que la pelota simplemente no quiere entrar, pero en la última jugada antes de que el cuarto árbitro anunciara el agregado, llegó la tragedia.

Nuno Mendes hizo el desborde por izquierda y, ante la marca, metió el centro por abajo. Parece que la pelota rozó a un jugador visitante y quizá eso explica cómo Gazzaniga, con rodilla al piso, no pudo abrazar el esférico, que entró a la cabaña tras pasar entre sus piernas. Un error que no merecía el mejor jugador del Girona en el encuentro y que deja un sabor muy amargo a lo que pintaba ser una noche inolvidable en el estreno de Champions.

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