Solo un golazo pudo acabar con la gran actuación de Thibaut Courtois y silenciar el Santiago Bernabéu y para que fuera más doloroso, tenía que ser de Kevin De Bruyne, que puso la paridad en el juego de ida de las semifinales de la Champions League.
La acción se dio al minuto 67’, cuando el City se logró asociar en la media luna y con un pase retrasado De Bruyne apareció con un disparo raso al poste derecho de la meta de Thibaut, quien, a pesar de su lance, no pudo llegar al balón.
Así la eliminatoria se igualó 1-1, en un duelo donde el Manchester City tuvo el control del esférico y exigió a Courtois al máximo.
De Bruyne, Courtois y una traición
Ambos jugadores belgas se conocían por la relación en el Chelsea como en la selección nacional. Pues bien Caroline Lijnen era novia de Kevin, cuando conoció a Courtois, con quien decidió entablar una relación al mismo tiempo. Desde entonces De Bruyne no ha perdonado al portero al que considera como un traidor por aquel suceso.
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