Dos mano a mano perdidos y una asistencia: el partido de Leo Messi contra Canadá

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No era un misterio pero sí había algo de intriga, espectactiva, por ver cómo rendiría Leo Messi con Argentina frente a Canadá. El mejor de todos los tiempos llegó al debut de la Copa América bajo cuidados físicos muy especializados y tras un primer semestre con reiteradas lesiones musculares, por lo que una de las primeras cuestiones a evitar era lesionarse o terminar con molestias importantes.

En segundo plano, y no por ello menos importante, el objetivo era ver el nivel que mostraría ante la física y potente Canadá, y Leo estuvo a la altura. Empezó jugando algo aislado, simple y corto, sin entrar en roces ni complicaciones a modo de calentamiento durante el primer tiempo.

Durante la primera parte Leo tuvo un mano a mano algo incómodo y no tan claro como los que tendría en el complemento. Recibió de Paredes, se abrió un poco a la izquierda y definió cruzado, cerca del palo izquierdo del arquero.

Ya en el complemento, al 64′ se fue solo frente a Crepeau, logró eludirlo, pero cuando definía al arco vacío apareció Cornelius para rozar la trayectoria y evitar el gol. Diez minutos más tarde volvió a irse mano a mano contra el arquero, se la picó, pero la pelota salió muy cerca del poste derecho.

No se le daba a Leo, que tenía ganas de gol, pero se desquitaría con una notable asistencia entrelíneas a Lautaro Martínez, para al 85′ marcar el segundo y definitivo tanto de la noche, que trajo tranquilidad al equipo.

Ya sobre el final, Leo tuvo un tiro libre en una posición ideal, pero a su remate le faltó algo de potencia pese a la buena colocación, aunque es verdad que Crepeau se jugó a ese palo y le salió bien ya que ganó segundos.

“Un rival muy físico, sabíamos que sería así. Nosotros fuimos inteligentes en jugar con paciencia, esperar el momento. Es importante empezar ganando”, dijo Messi a la prensa cuando finalizó el partido. Lo que sigue para Leo y compañía es Chile, el próximo martes 25 de junio.

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