Los golazos de Lamine Yamal y Dani Olmo meten a España a la final de la Euro

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La Euro ya tiene a su primer finalista: España. La Roja de Luis de la Fuente remontó en cuatro minutos un partido en el que comenzó mejor, sufrió un mazazo que le tenía en la lona, pero aparecieron los golazos de Lamine Yamal y Dani Olmo para darles el boleto a la final de Berlín tras vencer 2-1 a Francia.

Premio para la selección que está siendo la mejor de la Eurocopa, salvo una media hora ante Alemania en la que renunciaron a su esencia y la mano no pitada a Cucurella pudo dejarles fuera. Los fans alemanes que asistieron a la cancha del Bayern lo recordaron cada vez que el lateral del Chelsea la tocaba, pero tuvieron que cambiar los abucheos por palmas por los tantos de La Roja, que fueron poemas de gol.

Antes de la poesía, hubo drama. España perdonó un gol temprano, cuando Fabián Ruiz no metió fuerza a su cabezazo a segundo palo a centro de Yamal. El fallo le salió bastante caro porque Kolo Muani no perdonó en una jugada idéntica tres minutos después.

Francia tuvo el segundo, en un tiro y recorte del desenmascarado Mbappé que tapó un defensa, y luego llegó el despertador para España, cortesía del más joven de todos, Lamine Yamal. La calidad no conoce edad y la colgó de parte interna a la escuadra. Ni Pelé ni nadie habían marcado en un torneo mayor con 16 años todavía. Rabiot, quien criticó al culé en la previa por su partido en cuartos, fue recortado y vio en primera fila esta obra de arte.

Los galos todavía se preguntaban cómo entró el gol de Yamal cuando cayó el segundo, obra de Dani Olmo. El del Leipzig recuperó un rechace en la frontal del área, le hizo un recorte picando la pelota a Tchouameni, quien nunca se enteró de dónde quedó la bolita, y venció cruzado a Maignan, con Koundé llegando tarde a tratar de salvar el tanto.

Francia cambió de chip para el segundo tiempo y, salvo un balón largo en el que Maignan se la jugó fuera del área para barrer ante Nico Williams, los galos fueron mejores. Comenzaron a meter centros por todos lados y España se defendió, como pudo. Deschamps metió toda la carne al asador, dando ingreso a Griezmann, Camavinga y Barcola para buscar el empate, pero al perder a Kolo Muani, perdieron referencia en el ataque y se diluyeron la última media hora, que de por sí no es que fueran sobrados de ocasiones en esta Euro.

Los cambios partieron el centro del campo y eso permitió las posesiones largas de España, que le fueron sacando aire (y segundos) al partido. Barcola tuvo un tiro de la frontal del área que se fue por alto y una carrera de Mbappé que no pudo emular los goles de Lusail. Pelotazos a Giroud, a lo Füllkrug, tampoco sirvieron porque Francia añora el juego de conjunto de los germanos. España resistió y se mete a la final en la capital alemana, buscando romper el empate con la mannschaft para ser la máxima ganadora de la Euro.

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