Turquía sufre en los últimos minutos con Austria y una atajada monumental de Mert les da el pase a cuartos

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Turquía puso tanques y morteros al frente para ganarle la guerra por un 2-1 a una Austria que buscaba jugar con un cuadro más ordenado, así que ahora los sultanes se quedaron con el último boleto a los cuartos de final de la Eurocopa 2024, espacio en el que se medirán con los Países Bajos. 

Con un gol de Merih Demirat al minuto del partido, los otomanos tuvieron el control de las acciones. Jugada derivada de un tiro de esquina de Arda Guler, la joya del Real Madrid que provocó una carambola en área aprovechada por una barrida del central. 

Casi a través del corazón que de las ideas de juego, Turquía solventó gran parte del partido ante una delicada Austria que intentaba salir desde el fondo con balón controlado, razón por la cual la picardía de los otomanos les permitió conseguir el segundo en otro balón parado justo en el minuto 59, también cortesía de Demirat.

Cabe resaltar que Austria tuvo la oportunidad de emparejar el marcador en la primera parte con un córner cerrado que casi les da el gol olímpico ante la confusión turca, pero al recibir el segundo en el tiempo complementario, los austriacos dejaron atrás la música clásica para ponerse en un modo más rebelde y competir con el corazón.

Entre suerte y poco de táctica fija, Austria descontó en el marcador con un remate de Michael Gregoritsch en el 66’. A partir de este momento, Wunderteam entendía que no estaban tan lejos de la heroica, por lo tanto controlaron el balón en la mitad del terreno contrario a la espera del milagro. Sin embargo, los turcos jugaron con el marcador en contra a través de latigazos que amenazaban con el tercero: el partido se había roto en los últimos 20 minutos para dejarnos con el corazón al límite.

Turquía defendió con los dientes y en los últimos minutos una súper atajada de Mert en el segundo final, a mano cambiada con un remate casi a quemarropa, les dio el pase para ir a los cuartos de final con unos Países Bajos que tampoco asustan tantos, una señal de que será un partidazo.

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