El silbante inglés Anthony Taylor ha sido protagonista en la final de la Europa League ente el Sevilla y la Roma, con un par decisiones cuestionables en las áreas que se pudieron convertir en penaltis, uno por equipo.
La primera acción polémica se dio al minuto 76’, luego de que Lucas Ocampo cayera en el área producto de un contacto del defensa Roger Ibañez, el silbante no dudo en señalar la pena máxima ante la incredulidad de los jugadores de la Roma, sin embargo, el VAR llamó a Anthony Taylor y tras revisar la jugada, decidió dar marcha atrás a su decisión, ya que en una de las tomas se ve que Ibañez alcanza a puntear el balón.
La segunda acción polémica se dio al minuto 81, cuando los jugadores de la Roma pedían una mano en el área de Fernando, quien si hace contacto con su brazo izquierdo tras un centro, sin embargo, tras revisión en VAR, se mantuvo la decisión del silbante de no señalar penalti.
De igual forma, en el primer gol de la Roma, los jugadores del Sevilla le reclamaron a Taylor una falta sobre Ivan Rakitic, que no señala y no revisa en el VAR.
En el tiempo extra, Taylor agregó seis minutos y a la postre se jugaron casi 12 minutos antes de ir a la definición que sería desde los once pasos.
Mourinho no estuvo nada contento con todas las acciones que ocurrieron, muchas de ellas provocadas por el central como algunas faltas que no fueron marcadas a favor de la Roma.
Por si fuera poco, ya en la tanda de penaltis, el silbante de manera muy rigorista hizo que se repitiera el cobro definitivo con un adelantamiento del arquero de la Roma, Rui Patricio.
El argentino Gonzalo Montiel había fallado su disparo pero en la repetición anotó dándole así al Sevilla un campeonato más en la Europa League.