Atalanta hace méritos para eliminar al Marsella y va a la final de la UEFA Europa League

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La cita se presentaba interesante. La semifinal de vuelta entre Atalanta y Marsella era la ocasión perfecta para revisar una disputa intensa con el 1-1 en Francia. Bérgamo se volcó al estadio para acompañar al equipo italiano en una serie donde llegaba como gran favorito, después de haber dejado en el camino al Liverpool.

Gianluca Scamacca tuvo la primera gran ocasión dentro del área con un remate cruzado que pasó cerca del objetivo y ante la estirada de Pau López. El portero tuvo que intervenir para detener el disparo de media distancia de Davide Zappacosta. Estaba claro que Atalanta estaba yendo al frente para complacer a su público en la búsqueda del tiquete a la final de la UEFA Europa League.

Por su parte, el Marsella estaba tentando a la suerte. Antes de media hora, Scamacca estrelló una pelota en el larguero y López tuvo que desenfundar las manos de nuevo para evitar que Teun Koopmeiners aprovechara el rebote con el testarazo. El conjunto italiano estaba haciendo serios méritos para adelantarse en la serie, por si sacar el empate en Francia no había sido suficiente.

Los intentos había que concretarlos, pues ya se ha visto como muchas veces los desperdicios se pagan con goles en contra. La espera acabó cuando Ademola Lookman desenfundó al borde del área y con algún desvío en un defensor la pelota se acomodó en un rincón. La Dea pasaba a frente, muy merecidamente, al minuto 30. El andar de ahí al entretiempo fue muy tranquilo y sin muchas emociones.

Lo lógico era que la visita saliera a buscar riesgo para empatar la serie. Sin embargo, Atalanta siguió viéndose mejor en su conjunto. Matteo Ruggeri recorrió desde la banda izquierda hacia el centro antes de sacar un balazo hacia un ángulo y firmar un golazo al 52′. Los hechos eran elocuentes: la Dea era superior y no se veía por dónde iba a dejar escapar su ventaja.

La mejor oportunidad de descuento llegó con un tiro libre muy lejano que Jordan Veretout mandó al área. La pelota tomó más altura de la pensada y, en vez de ser centro, se estrelló contra el larguero. La acción había tomado por sorpresa a Juan Musso, que no iba a alcanzar a llegar en su retroceso. Atalanta se salvó.

Hubo mucha tranquilidad para el elenco italiano. El Marsella fue incapaz de generar mucho más peligro. El tiempo de adición fue el aviso para que el encargado de los juegos pirotécnicos encendiera la fiesta en Bérgamo. No hubo momento más apropiado, pues el partido se puso en términos de goleada en la última jugada con la escapada de Lookman y la definición espectacular con rosca para el 3-0 en el duelo y el 4-1 en el global.

Así se clasificó Atalanta a la final de la UEFA Europa League. Se citará ahora con el Bayer Leverkuse, complicadísimo equipo que ha venido sorprendiendo con su versatilidad a lo largo de la temporada y que se apuntó ya el título de la Bundesliga de Alemania.

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