Aficionados del Atlético de Madrid protagonizan altercados en la previa del partido de Copa ante Marbella

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Un choque de hinchadas manchó el partido en La Rosaleda | @football_norte

La previa del duelo de dieciseisavos de final de la Copa del Rey entre Marbella y Atlético de Madrid estuvo manchada por un brutal pelea entre los ultras rojiblancos representados en el Frente Atlético y los radicales del Málaga, conocidos como el Frente Bokerón. Nada tuvo que ver aquí el equipo que ejercerá como local en la eliminatoria, que se disputará en La Rosaleda por las condiciones del campo marbellí y con el objetivo de poder hacer más caja con las entradas.

En las horas previas al partido, se ha producido una trifulca entre seguidores de ambos equipos, que acabó con el lanzamiento de sillas, bengalas y otros objetos. Una pelea que no fue fruto de la casualidad, sino consecuencia de una relación desgastada con el paso de los años.

Desde hace varias semanas, en cuanto se supo que el Atlético de Madrid jugaría en La Rosaleda, el Frente Bokerón ya se preparó para cualquier movimiento del Frente Atlético en la ciudad. Pese a ser grupos de la misma ideología, no mantienen una buena relación. Incluso el grupo ultra del Málaga tiene una buena relación con Suburbios, una facción extinta del Frente, o con UltrasSur, pero no con los actuales radicales del fondo del Metropolitano.

Ante esta tesitura, el Frente Atlético ha sido custodiado durante todo el día por hasta tres furgones policiales. Pero cuando estaban en un bar en los aledaños de La Rosaleda, sufrieron una emboscada por parte del Frente Bokerón. Ahí comenzó una pelea que dejó imágenes para olvidar, son sillas y otros objetos volando por los aires y poniendo en riesgo la seguridad de los presentes.

Pese a la histórica rivalidad entre los grupos y que ambos estén catalogados como dos de los más peligrosos de todo el país, el partido no estaba declarado de alto riesgo. Esta circunstancia hubiera provocado que se hubieran reforzado las medidas de seguridad y hubiera sido más sencillo evitar estos incidentes. Quizás por no estar el Málaga presente, sino el Marbella, se optó por no adoptar medidas extraordinarias y poner en juego tan solo una vía para escoltar al Frente Atlético.

Sea como fuere, los radicales han logrado burlar las medidas de seguridad impuestas y han provocado un tumulto que ha vuelto a demostrar su escasa capacidad cívica. Tras sosegarse el conflicto, la previa continuó con total normalidad, sin conflictos aparentes y con los aficionados habituales conviviendo de forma pacífica y amistosa antes de la disputa del encuentro de octavos de final de la Copa del Rey.

Con información de Relevo

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