El Atleti no se cansa de fallar

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El Atleti empata con el Espanyol en la jornada 3 de LaLiga | Reuters

Sacar conclusiones tras apenas tres jornadas de LaLiga puede que sea algo injusto, pero la realidad es que el Atlético de Madrid parece bajarse del tren de los contendientes, porque duerme a 4 puntos del líder Barça tras no poder marcarle al Espanyol en el Metropolitano. Un empate sin goles ante un recién ascendido que no había sumado y resulta más difícil de creer considerando que los colchoneros tocaron la puerta una y otra vez en la primera media hora de juego, pero el gol simplemente no llegó. La misma historia de siempre con los colchoneros.

Simeone rotó para esta jornada doble. Griezmann, Llorente y Barrios, quizá los mejores en las primeras dos fechas, comenzaron en el banco. Se estrenó la alineación con los dos ‘nueves’ juntos, pero ni Sorloth ni Julián Álvarez, sea por mala fortuna, poca comunicación o las manos de Joan García, no pudieron marcar.

El poste le negó el gol a Lino, siempre una máquina de ocasiones, al minuto 7. Una jugada antes, Julián tuvo su primer pase de la muerte desaprovechado. Sorloth ganó múltiples balones aéreos, pero nunca tuvo la dirección adecuada. Riquelme también tuvo la pólvora mojada.

A la media hora del juego, el Atleti se llevó un susto a la contra, con el balón pasando de lado a lado dentro del área, un mal remate de Veliz y Javi Puado se la encontró, pero cruzó de más. Una bofetada que dejó atolondrado al Atleti por unos 10 minutos. Llegó otra ráfaga de centros y cabezazos sin dirección que dio el paso a vestidores.

Julián no volvió tras el descanso, con Simeone metiendo a Griezmann y Llorente. Estos dos se combinaron con una vaselina que el español perdonó dentro del área. El festejo finalmente llegó al 54′, en un accidente de jugada en el que Joan García salió mal al piso, se armó la pelotera y acabó la pelota dentro empujada por Riquelme. No contró, porque el VAR llamó al colegiado y se vio que solo había un defensa visitante cuando el portero quedó fuera de la cabaña. Los Periquitos fueron salvados de milagro.

El Atleti siguió teniendo el balón, pero en la última media hora, la más clara la tuvo el Espanyol, a la contra de nuevo, con un tiro cruzado de Cheddira que exigió al máximo Oblak. Y al 97′, Riquelme festejó de nuevo, pero la bandera arriba otra vez ahogó el grito de gol. Al Espanyol le salió el plan de rascar ante uno de los candidatos, aunque puede que los de Simeone no entren en esa categoría.

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