¿Guerra en el Barcelona? Víctor Font arremete contra Joan Laporta

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El excandidato a la presidencia del Fútbol Club Barcelona, Víctor Font, quien perdiera las elecciones para liderar al club frente a Joan Laporta en 2018, hizo una rara aparición pública este miércoles frente a los medios de comunicación. El empresario hizo un análisis de la temporada 2023-2024 del primer equipo varonil, luego de que hace un par de semanas enviara una carta en la que externaba sus preocupaciones a Laporta.

En su análisis, Font hizo especial énfasis en los malos manejos del actual presidente, quien, en su opinión, no logra aceptar los graves problemas económicos que enfrenta la institución: “vender un 49% de Barça Studios no es mala noticia, si encuentras un buen socio que pueda ayudarte a hacer que el negocio crezca. Pero [dos años después de la venta] no tenemos ni el dinero ni el negocio: hacemos huidas hacia adelante”, mencionó.

Asimismo, cuestionó la honestidad de Laporta en la construcción del equipo que dirige a la organización del Barça. “Todas las áreas están en manos de familiares y amigos del presidente. ¿Dónde se ha visto esto en una institución seria? Gente del club me ha llamado diciéndome que están preocupados”, declaró Font.

El empresario catalán fue cuidadoso cuando habló de una posible moción de censura en contra de Joan Laporta. No descartó que este sea un recurso en caso de que la situación no cambie: “La moción de censura debería ser el último movimiento, a veces el único, y solo lo utilizaré ante líneas rojas”. Sin embargo, llamó a los socios barcelonistas para que se unan a su movimiento y le den fuerza para tomar la dirección de los culés.

Finalmente, Font criticó fuertemente a la cúpula blaugrana por el despido de Xavi Hernández, algo que calificó como “un disparate”: “Eso ayudó a abrir los ojos de mucha gente. Hemos pasado página demasiado rápido porque fue un escándalo, un despropósito descomunal que hace pequeño al club y daño a los culés. Siento tristeza, es una muestra más de que así no podemos seguir. No lo digo yo, trasciende Barcelona, Catalunya y España; la gente se lleva las manos a la cabeza”.

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