Kylian Mbappé, ausente en la comida navideña del Real Madrid
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Unas décimas de fiebre convirtieron este viernes a Kylian Mbappé en la única ‘baja’ del Real Madrid en su tradicional comida de Navidad. El equipo blanco, que juega mañana en Vallecas, aprovechó el pequeño hueco del calendario esta semana para juntar a sus primeras plantillas de fútbol y básquetbol y brindar junto al presidente Florentino Pérez. El presidente de honor, Pirri, y varios miembros de la junta directiva también estuvieron presentes en el acto.
Un malestar general repentino apartó del evento a Mbappé, así como de la entrega de regalos en los hospitales que se ha producido por la tarde. El francés está lesionado (sufre un percance muscular en el muslo y no jugará ante el Rayo) y, además, permanece estos días en su domicilio para que el síndrome remita cuanto antes. El objetivo del futbolista pasa por llegar a la final de la Intercontinental del próximo miércoles; el Pachuca mexicano o el Al-Ahly egipcio, que se miden este sábado, serán el rival en Doha.
Ancelotti confirmó esta misma mañana que la pequeña rotura del galo no reviste gravedad alguna. “Afortunadamente sólo estará fuera un pequeño período y no perderá lo que ha conseguido en los últimos tiempos“, aseguró el entrenador. Asimismo, avanzó que espera que el ‘9’ pueda disputar “algunos minutos” en Qatar y estar luego preparado para cerrar el año contra el Sevilla el día 22 en el Bernabéu.
Ambiente relajado
La comida, que tuvo lugar en el pabellón de básquetbol de la Ciudad Deportiva, sirvió también para destensar el ambiente entre el conjunto de básquetbol. Los blancos naufragaron ayer ante Zalgiris (83-92) y el entrenador Chus Mateo se encuentra contra las cuerdas después de tres derrotas consecutivas en Euroliga y la pitada del WiZink. El equipo, con el capitán Llull a la cabeza, se olvidó por un rato de la crisis.
Entre las imágenes difundidas por el club se pueden apreciar conversaciones entre Bellingham y Caroline Weir, una de las estrellas del femenino; o que los cuatro brasileños del primer equipo (Vinicius, Rodrygo, Militao y Endrick) departieron durante un rato con Antonia Silva, compatriota del femenino que aterrizó este mismo verano en Valdebebas procedente del Levante. A Florentino, cariñoso con todos, se le fotografió junto a Güler, Valverde, Lunin, Carvajal o Ceballos, al que ha cerrado la puerta de salida de cara al invierno.
Aunque no aparecen en la galería publicada en la web de la entidad, los cuerpos técnicos de los tres equipos acudieron a la comida. Álvaro Arbeloa, entrenador del Juvenil A, también hizo acto de presencia, como suele resultar habitual. Y hubo otro detalle con mensaje: Raúl Asencio fue el único futbolista con ficha del Castilla en asistir… porque ya se le considera jugador del primer equipo a casi todos los efectos.
Después del almuerzo, Ancelotti y Chus Mateo se desplazaron al Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela para visitar a los niños ingresados, mientras que Modric y Sergio Llull pusieron rumbo al Hospital Universitario Sanitas La Moraleja. El resto de los integrantes de los primeros equipos de fútbol y básquetbol se distribuyeron por otros hospitales de la capital para repartir obsequios y momentos inolvidables entre los más pequeños.