Laporta acusa que el Caso Negreira sólo surge cuando Barcelona está en su mejor momento: “No compramos árbitros”

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El FC Barcelona celebró su Asamblea General para mostrar el ejercicio financiero de la temporada 2023-24 y solicitar la aprobación del presupuesto de 2024-25, sin embargo algunos socios aprovecharon el espacio para reclamarle a Joan Laporta el papel del equipo sobre el Caso Negreira, sin embargo el presidente del combinado blaugrana prefirió olvidarse de las críticas con una declaración contundente. 

Para el empresario, las críticas por la supuesta compra de árbitros generada a partir de pagos dudosos a José María Enríquez Negreira, entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), durante su primer mandato, sólo son comentarios negativos que tendrían la intención de desestabilizar al equipo. 

“Estamos orgullosos de una realidad, en la que el Barça vuelve a ser querido en todo el mundo. Nos piden academias desde todas partes y que les expliquemos nuestro modelo. La manera que veo mejor para mantener esta realidad es mantenernos más unidos que nunca y mantener la estabilidad institucional. Estamos luchando contra todo y contra todos. Lo palpamos cada día. Estamos luchando contra los que apoyan el Caso Negreira. Nos condenaron antes que juzgarnos. Cada vez que vamos bien, sacan el tema. Hay gente a la que le hace rabia que ganemos y nos tenemos que defender. No podemos mostrar debilidades. Hay que mostrarnos fuertes. Insisto en que no comparto los vaticinios apocalípticos de algunos, que no están ni se les espera. En el Barça tenemos que ser fuertes para luchar contra todo”, declaró Joan Laporta de forma pública. 

Una investigación de la Agencia Tributaria de España señaló que había facturas sospechosas de Barcelona a José María Enríquez Negreira, número dos del arbitraje español. La revisión hacendaria se centró en si había un claro caso de corrupción deportiva debido a que el equipo habría pagado durante dos décadas 7.5 millones de euros por “asesorías”, sin embargo el puesto que ocupaba el vicepresidente habría generado dudas sobre un supuesto conflicto de intereses. 

“Han querido condenarnos antes de juzgarnos y se está viendo que es una estrategia de nuestros rivales para perjudicar nuestra reputación. El Barça no ha comprado árbitros, en ningún caso, y ya ha habido resoluciones favorables a nosotros en este sentido. Estamos muy tranquilos, porque es un tema que ganaremos. Sí que tendríamos que estar muy pendientes de que las personas que han impulsado este caso no se cansan, y tenemos que mantenernos unidos en la defensa de los intereses del club”, finalizó. 

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