Vinicius mantiene quinta amarilla tras recurso fallido del Real Madrid y no estará ante el Athletic
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- LaLiga acusa al Real Madrid de presionar a los árbitros y rechaza su denuncia a Martínez Munuera
El Real Madrid se enfrenta a una baja crucial en su próximo encuentro contra el Athletic Club, ya que Vinicius Junior no podrá participar debido a la acumulación de tarjetas amarillas. La polémica surge a raíz de la protesta del jugador brasileño contra el árbitro Martínez Munuera en el último enfrentamiento contra Osasuna, una acción que completa su ciclo de sanción. A pesar de la apelación presentada por el club merengue, el Comité de Competición ha decidido no retirar la amonestación, lo que deja a Vinicius fuera del próximo choque.
La decisión del Comité de Competición se basa en el hecho de que la protesta de Vinicius Junior contra el árbitro efectivamente tuvo lugar, según lo consignado en el acta arbitral. Aunque el Real Madrid denunció en su queja la presunta campaña contra el jugador y los cánticos de “Vinicius, muérete” en el estadio de El Sadar, el Comité ha afirmado que no se puede desvirtuar la veracidad del acta arbitral en cuanto a la protesta.
Sin embargo, la defensa del club blanco no se centró únicamente en la acción de Vinicius, sino que señaló un problema más amplio: la supuesta pasividad arbitral frente a actos de racismo, odio e intolerancia que el jugador habría enfrentado en varios campos de fútbol. El Real Madrid denunció la falta de protección por parte de los árbitros y la Real Federación Española de Fútbol, argumentando que estos actos no se reflejan adecuadamente en las actas de los partidos.
El Comité de Competición ha rechazado estas acusaciones, afirmando que no se ha probado la pasividad arbitral en este caso específico. Aunque reconocen la frustración e indefensión que puede experimentar un jugador ante la falta de acción arbitral frente a situaciones de acoso, consideran que protestar al árbitro sigue siendo una falta que debe ser sancionada, independientemente de las circunstancias.
Escrito del Comité de Competición
“El club alegante señala en su escrito que el jugador amonestado viene soportando de modo habitual actos de racismo, odio e intolerancia en todos los campos de fútbol que visita el Real Madrid, afirmando asimismo que viene ‘siendo habitual la absoluta pasividad del colectivo arbitral y de la propia Federación’ y que ‘dicha desprotección y pasividad se evidencia en las reiteradas denuncias que esta parte ha tenido que interponer ante la Fiscalía General de Estado ante hechos que se repiten partido tras partido, sin que los árbitros dejen consignado los actos violentos, xenófobos y racistas en las actas de los partidos, blanqueándolos”.
“Respecto a la amonestación que aquí se recurre, no solo no se desvirtúa la presunción de veracidad del acta arbitral, sino que se reconoce que la protesta existió, si bien sería resultado ‘de la frustración e indefensión al comprobar la evidente pasividad del árbitro respecto de los cánticos que se estaban profiriendo contra su persona’. Tal circunstancia fáctica de pasividad, de enorme gravedad, no queda en absoluto acreditada y además resulta patente que todo jugador profesional conoce, o debería conocer, el resultado de la acción de protestar al árbitro”.