En el duelo de la jornada 16 de la Liga Profesional Saudí entre el Al Hazm y Al Fateh, los aficionados fueron testigos de un momento surrealista que dejó a todos boquiabiertos. El equipo local, Al Hazm, estaba liderando 1-0 cuando una jugada insólita cambió el curso del partido y selló su victoria por 2-0.
La situación extraordinaria ocurrió en el minuto 12 del encuentro, cuando el defensor del Al Fateh, Fahad Al-Harbi, quiso felicitar a su portero, Jacob Rinne, por una destacada atajada. Sin embargo, lo que debería haber sido un gesto amistoso se convirtió en una torpeza que quedará en la memoria de los espectadores.
En un movimiento desafortunado, Al-Harbi, en lugar de dar la mano a Rinne, tocó el balón y, para sorpresa de todos, se lo sacó de las manos al arquero. El árbitro no dudó en señalar la maniobra como un penalti, ya que el defensor había tocado el balón con la mano dentro de su propia área.
Con el marcador a su favor, Tozé fue el encargado de ejecutar el penalti, marcando el 2-0 definitivo para el Al Hazm. La singularidad de este gol quedará en la historia del fútbol como uno de los momentos más surrealistas de la Liga Profesional Saudí.
La victoria del Al Hazm sobre el Al Fateh se selló con este insólito penalti, dejando a los aficionados con una mezcla de incredulidad y asombro. Aunque el fútbol está lleno de sorpresas, pocas veces se presencian episodios tan peculiares como este, donde una felicitación bien intencionada se transforma en un penalti que altera el curso del partido.