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La llegada de Lionel Messi al Inter de Miami ha sido un éxito futbolístico y mediático para el club y la MLS. El siete veces Balón de Oro ya llevó a las ‘Garzas’ a un título en la Leagues Cup, la final de la copa estadounidense, y les dio tres puntos en su debut liguero.
Los tres torneos en los que ha tenido participación el argentino, han representado un calendario muy apretado. Messi lleva menos de un mes con el equipo de David Beckham, y ya ha disputado 9 partidos.
Con el acelerado ritmo de partidos y las grandes distancias que hay recorrer dentro de los Estados Unidos, se estima que para la Fecha Fifa de septiembre acumule más de 28,000 kilómetros en 32 días. Estas cifras significan un promedio de casi 900 km diarios.
La odisea de Messi
Los viajes del exPSG comenzaron tras la fase de grupos de la Leagues Cup. Tras derrotar a Cruz Azul y Atlanta en casa, recorrieron 1,773 kilómetros para disputar el partido ante Dallas FC tanto de ida, como de regreso.
Después de vencer en el DRV PNK Stadium a Charlotte, volvieron a emprender el vuelo con destino a Philadelphia. El partido de semifinales representó 1,601 kilómetros recorridos de ida y vuelta, y la final ante Nashville sumó otros 2,572 al acumulado total.
El siguiente compromiso fue ante Cincinnati en la US Open Cup. Ese trayecto requirió un viaje de 1,504 desde Fort Lauderdale hasta Ohio. De ahí, aprovecharon para volar directo a Nueva York por la cercanía de 907 kilómetros. Tras vencer a los Red Bulls volvieron a la Florida en un trayecto de 1,729 km.
Lo que está por venir
Antes de tener que volar a Argentina para el inicio de las eliminatorias mundialistas de Conmebol, Messi deberá recorrer su distancia más larga hasta el momento. El domingo 3 de septiembre, el Inter enfrenta al campeón defensor LAFC en condición de visitante. Los del Tata Martino deberán atravesar todo el país en un viaje de 7,496 km.
A esa distancia se le tiene que sumar el traslado de 7,126 km entre Fort Lauderdale y Buenos Aires, donde se deberá reportar con la albiceleste para el partido en el Monumental de River Plate.
A pesar de todas las comodidades al alcance de un futbolista de la talla de Messi, las distancias recorridas en 32 días pueden ser exhaustivas para alguien de 36 años acostumbrado a viajes cortos en Europa.
Además, cabe recordar que el campeón del mundo ha jugado prácticamente todos los minutos desde que ingresó a la cancha ante Cruz Azul. el ex Barcelona salió a los 15 minutos del final en el encuentro ante Atlanta, y salió desde el banquillo en Nueva York al 50’.