- Millonarios se fija en Delvin Alfonzo para la defensa
- Miguel Ángel Russo: “Los colombianos tienen un respeto muy grande y por eso los quiero tanto”
A pesar de las últimas noticias que han venido surgiendo recientemente todavía no se conoce un panorama alentador sobre la liberación del padre de Luis Díaz, por tal motivo al rededor del mundo se siguen preguntando qué hace falta para que ‘Mane’, como es conocido, pueda volver a abrazar a sus familiares y amigos.
Sin embargo se ha podido conocer que el caso de Luis Díaz y el secuestro de su padre, no es el primero que sucede en el mundo futbolístico, ya que el mediocampista nigeriano Obi Mikel, también sufrió el flagelo de esta tragedia en el 2018 mientras jugaba el Mundial de Rusia.
Por tal motivo dio una entrevista recientemente con talkSPORT y habló sobre la situación de su colega colombiano: “Me identifico con Luis Díaz y por lo que está pasando. En este tipo de situación no tienes absolutamente nada que hacer. Solo tienes que esperar porque te llamarán. Sé exactamente por lo que estás pasando y espero que se mantenga fuerte. Sé que es un momento difícil para él como jugador. También sé por lo que está pasando su familia”.
– Mensaje alentador
“Tienes a tus hermanos, tienes a tu madre, tienes a tus hermanas y lo que estarán pasando es absolutamente desgarrador. Mi mensaje para él es que se mantenga fuerte y haga todo lo posible para asegurarse de que su padre sea liberado”, aseguró el africano.
Reveló los duros momentos por los que pasaron: “A mi papá lo secuestraron mientras yo jugaba con la selección nacional en el Mundial de Rusia 2018 y estábamos a punto de jugar contra Argentina. Dos horas antes del partido recibí una llamada telefónica de mi hermano diciendo que mi padre había sido secuestrado por segunda vez en Nigeria. Lo secuestraron por primera vez y hablé con los secuestradores y me exigieron mucho dinero, que finalmente pagué antes de que liberaran a mi padre”.
– “Fue secuestrado dos veces”
“Pero la segunda vez ocurrió mientras jugaba para mi país y recibí una llamada telefónica de mi hermano diciendo que papá había sido secuestrado nuevamente por segunda vez. Eso fue absolutamente impactante. La primera vez fue impactante, pero la segunda fue aún más impactante porque estaba a punto de participar en uno de los juegos más importantes de mi vida. El solo hecho de saber que mi papá había sido secuestrado nuevamente fue absolutamente desgarrador”, aseguró en el desgarrador testimonio.
Relató que pudo hablar con su padre mientras estaba en cautiverio: “Tenía a mi papá al teléfono llorando y diciendo: ‘¿pueden darles lo que quieren? Porque aquí me han golpeado y me ponen una pistola en la cabeza cada vez dicen que me van a matar’. Me las arreglé para pagar mucho dinero para que liberaran a mi padre”.