Un partido más que emotivo fue el que vivió el mediocampista español Andrés Iniesta, quien se despidió del Vissel Kobe, club japonés con el que fichó el 24 de mayo de 2018, en duelo de homenaje ante el Barcelona, el conjunto de sus amores, y donde la derrota de 0-2 en el Nuevo Estadio Nacional de Tokio fue lo de menos.
Iniesta se reencontró con Xavi Hernández en el túnel de acceso al campo y ambos se fundieron en un emotivo abrazo, además de intercambiar palabras.
Tras ello y a diferencia de los partidos normales, los jugadores del Vissel Kobe como del Barcelona se intercalaron para rodear al protagonista, quien también cargaba consigo una camiseta del club blaugrana.
Gavi se acercaron para abrazarlo e Iniesta le comentó al jugador del Barcelona con humor: “Luego la camiseta, sino luego me matan mis hijos”.
Y finalmente llegó el momento de decir adiós, Iniesta disputó sus últimos 81 minutos con el Vissel y salió de cambio por Haruya Ide. El español se marchó entre una gran ovación del público, lo que provocó que brotaran lágrimas en el rosto de Andrés, quien las removió con la camiseta del Barcelona que tenía, mientras daba la vuelta al estadio por la pista de atletismo para decirle adiós, mientras la tribuna se le entregaba al coreando “¡Andrés Iniesta, lolololololo, Andrés Iniesta!”.
Tras el duelo, Iniesta se dijo agradecido con la afición del Vissel y con el Barcelona.
“Primero que todo, un día muy feliz para todos los aficionados al fútbol, Barça, al Vissel. Un día importante para mí, en este campo conseguimos el primer título de la historia del Vissel y muy feliz de haber disputado este partido. Un día especial, muy feliz para mí por poder jugar contra el Barça, agradecerle el esfuerzo de estar aquí solo 24 horas en Japón y creo que la gente ha disfrutado y eso es lo que me queda”.
El mes pasado Iniesta anunció que dejaría al club japonés tras el último encuentro el primer de julio en la ciudad de Kobe.
El español disputó cinco temporadas con el Vissel Kobe y no ha anunciado sus planes posteriores. El mediocampista de 39 años dice que quiere seguir jugando, lo que no ha ocurrido mucho esta temporada.