Paraguay hunde a Brasil con un golazo de Diego Gómez
- Datos y estadísticas del partido
- Colombia le corta las alas a Argentina
- La última salida en falso del ‘Dibu’ Martínez: tremenda bofetada a la cámara
La octava jornada de la Eliminatoria sudamericana rumbo al Mundial de 2026 se cerró con un buen encuentro. Paraguay recibió a Brasil en un enfrentamiento en el que las necesidades por escalar en la tabla de posiciones eran conjuntas y donde las sensaciones que se traían no eran buenas.
La visita arrancó dominando más la pelota, pero no se acercaba con claridad al área contraria. El ritmo se empezó a perder entre tanta disputa física y los reclamos constantes al árbitro por parte de ambos equipos. No pasaría mucho para que llegara la gran sorpresa.
Paraguay metió un golazo con Diego Gómez pegándole de borde externo de media distancia, haciendo sonar el metal del palo y celebrando el 1-0 al minuto 20. La grada celebró a rabiar una pintura digna de enmarcar y resaltar. Ahora le correspondía a los locales jugar con la mayor inteligencia.
Como era de esperarse, el combinado guaraní se vio obligado a retroceder y se salvó en una clarísima: Guilherme Arana remató y Omar Alderete tuvo que apagar el incendio casi en la línea. Paraguay se las ingenió para mantener la ventaja y refrescar las ideas de cara al segundo tiempo.
El descanso, se notó, sirvió mucho para los locales. Se planteó un partido en el que una férrea doble línea de cuatro hombres contuvo con eficiencia la mayoría de los avances de Brasil. Rodrygo la tuvo para el mano a mano y la mandó por encima. Vinicius también probó de media distancia y Roberto Fernández exhibió los reflejos.
Damián Bobadilla estuvo cerca de ampliar la cuenta con un cabezazo que pasó a centímetros del objetivo. De cualquier forma, lo más importante para Paraguay era llegar a los últimos minutos ganando y provocando un estrés tremendo en el equipo de Dorival Junior. El trabajo de Gustavo Alfaro se nota.
Fue entonces triunfo para Paraguay, que saca un poco la cabeza del agua y se ilusiona con mejores cosas para lo que viene en su búsqueda de un cupo al Mundial. Por el contrario, Brasil sigue decepcionando a propios y extraños, con un juego que no convence y unos resultados que no corresponden con su historia en el fútbol.