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La inexplicable decisión del Birmingham de Tom Brady de despedir a Jonh Eustace está dando malos resultados para el cuadro blue, y ahora se encuentra vagando por la media tabla del Championship, la segunda división británica.
El equipo del que Brady es dueño minoritario nombró a Wayne Rooney como el técnico encargado de llevar al Birmingham de vuelta a la Premier League, justificando que el ex director técnico del DC United tenía la ambición para lograrlo.
Con está tónica, Rooney debuto ante el Middlesbrough de Michael Carrick, cayendo por 1 a 0 en su visita al norte de Inglaterra, siendo este el declive del nivel que había presentado el equipo al arranque del torneo.
Con Eustace al mando, el Birmingham logró su mejor arranque de temporada en 5 años, permaneciendo cerca de los puestos de playoff para el ascenso a primera división, pero con Rooney en la dirección técnica, los blues ligan tres derrotas seguidas, perdiendo todo el progreso de Eustace.
En su segunda derrota de local ante el Hull City, Rooney salió abucheado por la afición, recriminando la decisión de nombrarlo como técnico tras su desastroso paso por el Derby County tiempo atrás.
Ahora, se encuentra fuera de los puestos de playoff de ascenso y tiene un difícil calendario en este mes, enfrentándose al Ipswich, que marcha como segundo lugar de la tabla, al Sunderland que se encuentra en puesto de playoff, al Sheffield Wendsday que pelea por la permanencia y al Blackburn Rovers.
Si en estos cuatro partidos Rooney no saca puntos positivos para Birmingham, seguramente su puesto estará en la cuerda floja y la afición se volverá más hostil con el en St Andrew´s.