Wrexham certificó el sábado su ascenso a la cuarta división del fútbol inglés, cumpliendo el primer capítulo del sueño de sus célebres propietarios Ryan Reynolds y Rob McElhenney.
Los actores de Hollywood estuvieron presentes entre los más de 10.000 aficionados en el estadio Racecourse Ground — en el norte de Gales — para ver a Wrexham coronarse campeones de la National League con la victoria 3-1 ante Boreham Wood.
Reynolds y McElhenney se transformaron en aficionados tras adquirir al club galés por 2,5 millones de dólares en 2021.
Parte del proyecto fue improvisar un documental — titulado “Welcome to Wrexham” (Bienvenidos a Wrexham) — para relatar la trayectoria de un histórico club venido a menos y que resurge bajo la gestión de dos actores casi sin conocimiento de fútbol.
La segunda temporada tendrá un feliz final. Wrexham volverá a la League Two — tres divisiones por debajo de la Premier League — por primera vez en 15 años.
Wrexham mantiene una diferencia de cuatro puntos sobre su escolta inmediato Notts County a falta de una fecha, con lo que garantizó el ascenso directo a la League Two.
Entre los espectadores en el Racecourse estaba Paul Rudd, otro actor de Hollywood que fue visto libando cerveza con vecinos de la ciudad, y observó el partido en el palco junto a Reynolds and McElhenney, quien acabaron llorando cuando sonó el silbatazo final.
Reynolds es reconocido por su papel en las películas de “Deadpool”, mientras que McElhenney es el creador de la serie televisiva “It’s Always Sunny in Philadelphia”. Uno de sus objetivos al adquirir a Wrexham es llevar a un club con 158 años de existencia — el tercero más longevo en el fútbol profesional — a la Premier League.
Como ha sido habitual durante la temporada, Wrexham tuvo que sufrir al verse en desventaja cuando apenas habían transcurrido 44 segundos.
El cuadro galés lo empató a los 15 minutos y Paul Mullin, su delantero y referente, aseguró la victoria con dos notables goles en el segundo tiempo.