Adam Marušić rescata a la Lazio: triunfazo agónico ante un pálido Juventus
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En lo que parecía ser el partidazo de la fecha, se terminaron dejando más dudas que certezas para la Juventus en el Estadio Olímpico de Roma. Lazio obtuvo tres puntos vitales en la última jugada del partido, luego de vivir un duelo muy cerrado, denso en la mitad del campo y con pocas oportunidades de gol para romper el cero en ambos pórticos.
La igualdad no le convenía a ninguno de los dos; por un lado, Juventus podía ceder más ventaja en la lucha por el segundo lugar, mientras que la Lazio no podía dejar pasar el último tren para pensar en el frente internacional. Ambos tuvieron sus episodios de dominio, pero al fin Adam Marušić logró traducir sus ganas con fútbol, dejando a su equipo más cerca de dichas plazas.
Gran parte del período inicial fue para la Lazio, que tuvo al menos tres oportunidades de gol claras por intermedio de Valentín Castellanos y Felipe Anderson, los más desequilibrantes en juego ofensivo para la escuadra celeste. Si bien respondió la ‘Juve’ con un remate de Federico Chiesa que exigió al arquero rival, Christos Mandas, ocurrió relativamente poco en el juego.
Para la etapa complementaria mejoró Juventus, sin ser el de grandes actuaciones como en otros tiempos, pero intentó tener un poco más de juego elaborativo y volumen ofensivo con las modificaciones de Massimiliano Allegri.
Para revisar otra oportunidad de gol clara en el complemento, había que llegar a los 72 minutos con un impacto de Adam Marušić, el cual se desvió en un contrario y pasó casi que rozando el poste izquierdo del golero polaco, Wojciech Szczęsny.
Hubo una escandalosa jugada que pedían como pena máxima a favor de los capitalinos en esa misma secuencia, pues el público reclamó un agarrón de Bremer sobre Mattia Zaccagni que sí fue. Tranquilamente pudo pitar penal el colegiado.
En el último suspiro del juego, cuando parecía todo mundo resignarse con el empate a ceros, apareció la cabeza salvadora de Adam Marušić para decretar el triunfo final, a los 90+3′. Un centro prodigioso de Matteo Guendouzi al segundo palo derivó en el impacto del montenegrino y la celebración agónica.
A fin de cuentas, viendo la otra cara de la moneda, es una dolorosa derrota que deja a la Juventus con su cuarto partido al hilo sin sumar de a tres. Si bien no peligra su cupo a Champions League, va dándole toda la ventaja al Milan para que escolte a su clásico rival, el Inter, que está a medio paso de salir campeón.