El Inter de Milán deja escapar el tren y empata ante Bolonia en el Giuseppe Meazza

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Un pinchazo que puede salir caro. El trago amargo de la Supercopa de Italia puede que aún esté dejando secuelas en el Inter de Milán, y este miércoles, ante el Bolonia, una gran prueba de ello. El elenco de Simone Inzaghi ha dejado escapar la tortuga, pese a darle vuelta al 0-1. Sin embargo, la parte complementaria ha sido de terror, y un ‘misil’ de Emil Holm ha desatado un maremoto en el Giuseppe Meazza.

El Inter, pese a ser el claro favorito a revalidar título del Scudetto, no está siendo tan decisivo como lo fue la pasada campaña. Llegó al Meazza con dos partidos menos que el Nápoles y la posibilidad, en caso de ganar ambos, de colocarse en lo más alto con los mismos partidos. Pero los equipos le han tomado ligeramente la medida y, aunque sea en casi todas las fases y minutos del partido superior al rival, le cuesta mucho más cerrar ciertos choques.

Fue precisamente Santiago Castro uno de los protagonistas del día. Primero, por ser relacionado con el propio Inter para este verano por su gran temporada. Después, por abrir la lata con un gol de ‘9’ puro, de depredador de área. Porque supo ver el gol cuando nadie más lo veía. Se colocó en la trayectoria del disparo de Nikola Moro y desvió ligeramente para confundir a Sommer, que nada pudo hacer para evitar el tanto. Le tocó remar al Inter, pero es un especialista también en esto el equipo de Inzaghi. Y en apenas cuatro minutos el partido estaba igualado. Fue Dumfries el que aprovechó su espectacular estado de forma para seguir salvaguardando su puesto en el once inicial.

Marcó un gol muy al estilo Inter. Robó Bastoni en el centro del campo y salió disparado el combinado ‘nerazzurro’. Thuram condujo la contra y esperó los refuerzos. Fueron los dos carrileros. Dejó de tacón para Dimarco y éste fusiló. Skorupski consiguió parar el tiro, pero dejó un rechace manso para que Dumfries definiera sin oposición y en carrera, imparable. Empatado el duelo llegaron los mejores momentos del Inter. Fue muy superior con un Lautaro superlativo que quiso responder a su compatriota Santiago Castro. Jugó e hizo jugar. Hasta que consiguió su ansiado gol en una temporada complicada en este sentido para el capitán. Otro gol al estilo Inter. Otra contra. Dimarco se marchó en profundidad y sacó un centro para que el ‘Toro’ pusiera al Inter por delante justo antes del descanso.

El Bolonia, pese a su insistencia, no generó demasiado peligro hasta que Dimarco cometió un error que dio pie al gol. Despejó mal de cabeza el carrilero zurdo y el balón cayó en pies de Orsolini. Levantó la cabeza el italiano y dejó en la frontal para Holm, que disparó con la fortuna de que rozó lo justo en Bastoni para que desviara, de nuevo, ante Sommer, otra vez impotente al no poder hacer nada. El Inter se dejó puntos en casa ante un rival complicado como el Bolonia y dejó escapar, por el momento, sus opciones de ser líder dependiendo de sí mismo. El Bolonia sigue sumando y se acerca a puestos europeos.

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