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En la jornada 9 de la Serie A italiana, la Salernitana y el Cagliari igualaron 2-2 en un partido que dejó un sabor agridulce tanto para los locales como para los visitantes. Este partido marcó el debut de Filippo Inzaghi como entrenador de la Salernitana, y aunque no logró llevarse la victoria, su equipo mostró carácter y determinación en el terreno de juego. El portero mexicano, Guillermo Ochoa, permaneció en el banquillo.
Desde el inicio, la Salernitana tomó la iniciativa, pero fue el Cagliari quien tuvo la primera ocasión de peligro. Zito Luvumbo, con su velocidad y desequilibrio, causó estragos en la defensa local. Boulaye Dia fue el jugador más incisivo por parte de los de Inzaghi, generando peligro en el arco defendido por Simone Scuffet. El duelo táctico entre ambos equipos se intensificó a medida que avanzaba el partido.
La segunda mitad comenzó algo trabada, con numerosas interrupciones debido a faltas en el centro del campo. El Cagliari continuaba amenazando con el desequilibrio generado por Luvumbo, y finalmente, al minuto 79, el delantero angoleño rompió el empate tras aprovechar una pérdida de balón de la Salernitana. La afición local temía lo peor, pero la Salernitana no se rindió.
A los 86 minutos, los locales lograron el empate gracias a un potente disparo de Boulaye Dia que Simone Scuffet no pudo detener, pero la emoción no paró ahí. Nicolas Viola le devolvió la ventaja al Cagliari al minuto 88, tras un gran centro de Eldor Shomurodov. Parecía que el Cagliari se llevaría la victoria, pero el destino tenía otros planes.
Dia al rescate
En los minutos finales, Viola pasó de héroe a villano al cometer una infracción por mano en su propia área. Tras la revisión del VAR, se marcó un penalti a favor de la Salernitana. Boulaye Dia fue el encargado de ejecutar la pena máxima y no falló, anotando su segundo gol del partido y asegurando el empate 2-2. El estadio estalló de emoción, y Filippo Inzaghi logró su primer punto como técnico de la Salernitana en un emocionante final in extremis.
Este empate sabe a poco para ambos equipos, ya que continúan luchando en la parte baja de la tabla de clasificación de la Serie A, ocupando los puestos 19 y 20.