Inglaterra ‘pasa la página’ de Gareth Southgate y despacha a Irlanda

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Después de un fallido objetivo en la Eurocopa para Inglaterra, el seleccionado hasta entonces dirigido por Gareth Southgate, llegó el momento de afrontar un nuevo reto. Bajo el interinato de Lee Carsley y con gran parte de sus figuras, el equipo de los ‘Tres Leones’ visitaba a una Irlanda ausente de la justa europea, con la intención de pisar fuerte en su debut de Nations League y ganar en el Aviva Stadium de Dublín. En efecto, el saldo fue positivo, tanto en lo numérico como futbolístico.

Con las dianas de Declan Rice (11′) y Jack Grealish (26′), la visita despachó rápidamente a los irlandeses en el primer tiempo. Esto bastó para sumar sus primeros tres puntos en la actual edición, además de dar ese paso inicial en aras del objetivo claro de ascender. Cabe recordar que Inglaterra forma parte del grupo 2 de la Liga B, pues fue relegado en septiembre de 2022.

El cuadro inglés arrancó el partido con el pie en el acelerador, intentando romper la defensa rival para provocar alguna sorpresa rápida sobre los predios de Caoimhin Kelleher, arquero del Liverpool. El cero duró muy poco, ya que Declan Rice, volante a servicio del Arsenal, estampó el primer gol del juego apenas a los 11 minutos. No lo celebró en medio de los abucheos locales, recordando su nacionalidad irlandesa.

Todo nació de un balón largo en el fondo que envió Trent Alexander-Arnold, cruzado hacia la izquierda hacia Anthony Gordon en medio de las dudas defensivas. Un tiro suyo y la gran atajada derivó en un centro desde la derecha. Harry Kane falló en su intento de remate en el área; sin embargo, el balón quedó suelto en el área para que impactara Rice, con su botín derecho, a todo el ángulo izquierdo de Kelleher. Gran anotación del volante de 25 años.

Y eso no se quedaba así, pues en cuestión de minutos, Inglaterra liquidaba rápidamente el juego a través de Jack Grealish, futbolista a servicio del Manchester City y que también jugó para Irlanda en el pasado. A los 26 minutos, el extremo selló la pasividad de la defensa rival tras una sucesión interesante de toques y la pared de Bukayo Saka con Declan Rice. Fue el mismo Rice, en línea de fondo, quien cedió el balón rasante para que Grealish impactara con su pierna derecha, al palo más lejano, llevando a que se liquidara el juego apenas en la primera etapa.

El resto del juego fue no más que un trámite. Irlanda intentó adelantar líneas, pero cualquier intento ofensivo se esfumaba con malas decisiones o el robo de balón de Inglaterra, cuya posesión superó el 70% en el trámite del juego. A fin de cuentas, victoria sólida del elenco foráneo, que recibirá el 10 de septiembre a Finlandia en Wembley para vivir la segunda fecha.

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