Este partido siempre convoca, aunque en esta oportunidad no existía mucha expectativa. América de Cali y Millonarios llegaban a su partido aplazado por la fecha 16 ya clasificados. Eso sí, el cuadro Escarlata todavía tenía posibilidades de ser cabeza de cuadrangular y obtener el punto invisible.
De cualquier manera, el Pascual Guerrero se vistió de fiesta. Horas antes del pitazo inicial, el club Escarlata publicó un comunicado relatando la situación de sus lesionados. Lo que más zozobra genera en los aficionados es la lesión de John García, del cual todavía no se tiene un diagnóstico claro.
Más vale prevenir que lamentar
Ya en Claro Sports habíamos previsto un duelo precavido. Asumir riesgos de lesiones o sanciones con la clasificación en el bolsillo hubiese sido un error para cualquiera de los equipos. Además, el campo y lluvia llevaron a que se tuviese mucho más cuidado en cada disputa.
Millonarios con cinco en el fondo y sin muchos de sus titulares. Le cedió la pelota a América durante los primeros 20 minutos y la verdad es que no lo pasaba mal. El Escarlata, bajo esa dinámica, solamente pudo generar una clara con un pase profundo de Adrián Ramos para Cristian Barrios, pero Álvaro Montero salió a tiempo a despejar.
Algo había que mostrar
A pesar de la idea, Millonarios no es un equipo que se siente cómodo en un bloque bajo. Logró recuperar la pelota y llevar el partido al tercio central del campo y ahí se empezaron a abrir los caminos a las áreas. Edwin Cardona intentó un remate de media distancia a las manos de Montero y entre Ramos y Carlos Darwin Quintero perdieron una increíble al frente del arco.
El Embajador merodeaba por momentos el predio de Jorge Soto, pero no se acercaba con real peligro. Solamente un disparo lejano de Luis Paredes y una incursión por el sector derecho de Yúber Quiñones que terminó en un centro errático generaron algo de estrés en las tribunas.
La conexión entre Cardona, Quintero y Ramos iba a dar resultado en el 41′. El centrodelantero pudo llegar al mano a mano contra el golearo albiazul y no falló para abrir la cuenta. Óscar Vanegas reclamó mano al inicio de la jugada, pero Ramos había controlado la pelota con el hombro. Así, América conseguía su propósito de subir al segundo lugar de la clasificación.
Alberto Gamero decidió reformar el equipo para el segundo tiempo ya con el marcador en contra. Hizo ingresar a Mackalister Silva, Beckham Castro y Larry Vásquez en remplazo de Yúber Quiñones, Ricardo Rosales y Jorge Arias. Millonarios volvía a su defensa habitual con cuatro hombres. Seguramente la idea del entrenador era tener más minutos el empate antes de utilizar jugadores que son habituales titulares.
Ahí se cambiaron totalmente los rumbos del partido. El Embajador se apoderó de la pelota y se adueñó de todo el protagonismo. Una jugada llena de lujos de Silva en el borde del área estuvo a punto de convertirse en un golazo, pero la falló la mira por centímetros. Ya era un aviso para que América no se confiara.
El juego era muy entretenido y Millonarios parecía favorito para empatarlo. Sin embargo, pasó gran parte del tiempo sin ocasiones reales. Mackalister Silva tuvo otra con un remate dentro del área que dirigió a la parte externa de la red. El tiempo se consumió con la propuesta albiazul, que no fue suficiente para empatar y América suma tres puntos que le permiten llegar como cabeza de grupo de cara a la fecha 20.