La Liga de Campeones de la CONCACAF es el torneo internacional más importante a nivel de clubes en la región de Centroamérica y el Caribe y es el escenario ideal para medir a los equipos mexicanos ante rivales de otros países. Sin embargo, este año, los dos últimos campeones aztecas Atlas y Pachuca, no lograron superar los cuartos de final, lo que representa un gran fracaso para ellos y para el fútbol mexicano en general.
El Pachuca, uno de los equipos más experimentados en la competición, fue eliminado por el Motagua de Honduras en los octavos de final, gracias a la regla del gol de visitante. A pesar de que el Pachuca empató el duelo de ida 1-1, en la vuelta volvió a igualar sin anotaciones en el Estadio Nacional de Tegucigalpa y no pudo romper la igualdad. Con este resultado, los Tuzos se despidieron temprano de la competencia.
Por su parte, el Atlas, enfrentó al Philadelphia Union de la MLS en los cuartos de final. El equipo rojinegro no pudo concretar en el partido de ida, donde perdió por 1-0 y en la vuelta no logró cosechar más que un empate 2-2 en el Estadio Jalisco. A pesar de su lucha durante el compromiso, la impotencia ofensiva del Atlas se hizo presente y no lograron remontar el resultado global de 2-3. De esta forma, los rojinegros también dijeron adiós al certamen de una manera desalentadora.
Es importante destacar que a partir de las semifinales de la Liga de Campeones de la CONCACAF, habrá un equipo estadounidense sí o sí en la final, ya que el LAFC y el Philadelphia Union se enfrentarán en una de las llaves. Esto demuestra el creciente nivel del fútbol estadounidense y su presencia cada vez más fuerte en la competición.
De igual manera, aún quedan dos equipos mexicanos en la competición: Tigres y León. El León ya se encuentra en semifinales después de haber vencido al Violette de Haití, mientras que Tigres todavía tiene que jugar la vuelta de los cuartos de final frente al Motagua, después de haber ganado la ida por 1-0. ¿Podrá la Liga MX recobrar la hegemonia en CONCACAF?