El Newcastle pica con efectividad y frena el buen juego del Tottenham
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Gran partido se dio este domingo en la tercera jornada de la Premier League de Inglaterra. El Newcastle recibió al Tottenham en un duelo que ya prometía bastante en la previa por las buenas nóminas con las que cuentan y la necesidad de sumar los tres puntos para no alejarse de la punta de forma temprana.
El arranque se dio con un equipo visitante más propositivo y buscando peligro en ataque. El juego se detuvo por la lesión del árbitro asistente 1, por lo que el cuarto juez tuvo que calentar para relevar en funciones a su compañero y que el perjudicado pasara a ese sitio, que es de menos esfuerzo físico.
Un buena ocasión para los Spurs llegó con Wilson Odobert, quien lució su gambeta y envió un remate alto. La visita jugaba bien, pero le faltaba pólvora en la zona decisiva. Eso le iba a pesar más tarde, siendo claro favorito cuando el marcador todavía no se había movido.
A pesar de estar aguantando, el Newcastle se fue arriba. Se dio una jugada por sector izquierdo en la que Lloyd Kelly envió el centro y Harvey Barnes impactó de primera al minuto 37 para no darle posibilidades a la salida del portero Guglielmo Vicario. Suficiente para irse ganando al descaso.
Lo que se había visto era animado, pero el segundo tiempo iba a esta aun mejor. El Newcastle estuvo cerca del segundo cuando Alexander Isak iba de frente al arco, pero se demoró en resolver y cayó sin intento efectivo. Aunque el atacante pedía falta, el árbitro ni lo volteó a ver.
El Tottenham, que había jugado mejor hasta ahí, iba a conseguir su premio. Brennan Johnson remató y en medio del afán por despejar, Dan Burn cometió el pecado del autogol al 56′. Llegaba entonces un empate que iba a obligar a ambos conjuntos a ir al frente a buscar riesgo.
El portero local, Nick Pope, iba a ser determinante en el juego. James Maddison metió un tremendo disparo de media distancia que iba con dirección a un ángulo, pero la atajada espectacular y oportuna del guardameta mantuvo la igualdad necesaria para mantener el ánimo.
El bloqueo de Pope se volvió más trascendental con el estallido de emoción que se venía en St. James’ Park. Joelinton dio un pase espectacular para la escapada de Jacob Murphy. Con gran generosidad, este la cedió para que Isak solamente tuviera que empujarla y celebrara el 2-1 al 78′.
Las Urracas se llevaron entonces los tres puntos ante su público aplicando efectividad pura y aprovechando al máximo las ocasiones. A pesar de que el Tottenham jugó mejor, tendrá que trabajar en la definición para superar este arranque irregular que ya le pone retos sobre la marcha.