Por: Rosa Covarrubias
Charlyn Corral es sin duda un referente en el fútbol nacional. La actual jugadora del Pachuca ha sido una de las deportistas más destacadas de México y una prueba de ello es lo que logró en el balompié español al conquistar el Pichichi y ser la única mujer mexicana en obtener dicho reconocimiento, por ello, en el Día Internacional de la Mujer, la seleccionada nacional repasa cómo se fue abriendo camino en este deporte y de todo lo que se necesita cambiar para lograr una equidad de género en el fútbol de nuestro país.
Ser mujer y referente en el fútbol mundial
“Es un gran orgullo porque creo que lo que empezó como un sueño de niña hoy es una realidad, he influido en muchas mujeres, inclusive también he tenido el respeto y reconocimiento de muchos hombres durante toda mi carrera. Ojalá que pueda hacer más cosas y el día de mañana que ya no juegue siga siendo ese ejemplo para mucha gente”.
Crecimiento del fútbol femenil en 20 años
“Hace 20 años éramos muy solitarias las mujeres que practicábamos fútbol, muchas veces lo hacías sin convicción, lo hacías porque nos gustaba, por hacer un deporte. No había ligas, éramos como esos bichos raros, pero hoy en día podemos decir que el fútbol femenil es una realidad”.
“El nivel ha crecido muchísimo, antes solo podías sobresalir si tenías un poquito de entrenamiento, obviamente talento era importante, pero si eras constante podías estar arriba y hoy eso no es suficiente. El físico ha mejorado, la constancia, la disciplina de entrenar diario, todo eso ya cambio”.
Un ejemplo para las generaciones que son una realidad
“Nunca imaginé lo que iba a lograr, eso sí, creo que ha superado mis expectativas. A los 11 años me encontraba jugando nacionales, con mi primer convocatoria a la sub 15, veinte años después y aquí seguir, hace que la piel se me enchine, todo lo que he pasado, creo que hoy Charlyn Corral es una realidad, es un nombre que va a quedar para la historia. Como dice mi papá, pude haber terminado mi carrera a los 15 años, cuando la FIFA me nombra ‘Niña prodigio’ y a lo mejor ahorita estar viviendo de eso, pero gracias a Dios seguí y hoy en día sigo vigente que eso es muy difícil”.
Complementar fútbol con estudios
“En ese aspecto me siento muy orgullosa, no fue nada fácil estudiar y jugar. Yo le diría a las niñas que nunca dejen sus estudios, porque es cierto que el fútbol femenil ha crecido, pero hoy en día no puedes vivir de eso, inclusive un hombre, a lo mejor si a uno le va bien, puede ganar bien. Más que el dinero les diría que lo más importante es que tengan algo más en su mente porque eso te hace crecer en todos los aspectos, uno solo se enfoca en una cosa y siento que te limitas”.
“El día de mañana les va a ayudar a ser una persona diferente y creo que eso me ha ayudado, nunca he sido una más, aparte de buena futbolista siempre tuve cosas en la cabeza que me hacían diferente”.
¿Qué necesita la mujer en el fútbol para tener una equidad con los hombres?
“Primero se debe mejorar en los clubes, ahorita que hay una liga. Las condiciones, muchas veces se habla de dinero, creo que no solamente es eso, sino de mejorar todas las condiciones, desde unas buenas instalaciones, un buen viaje, brindar todas las armas para que tú como deportista puedas dar tu cien por ciento y eso es algo que viví en Estados Unidos, en la Universidad, creo que nuestra cultura es te doy, pero tú ¿qué me das?, siempre estamos con ese duelo y no es así, creo que muchas veces es invertir, dar y ser paciente a que solito el resultado va a llegar”.
“Cuando se empiece a confiar, a creer en las mujeres, darles todo lo que necesitan, es cuando a lo mejor se tendrán las ganancias que el directivo quisiera, pero muchas veces sí es tener esa inversión, esa paciencia de decir: ‘te doy todo, te ofrezco todo para que puedas rendir. Creo que pasa con los hombres, hay unos que ganan más que otros, pero las condiciones básicas son buenas, todos ganan bien, tienen buenas instalaciones, fisios, tienen todo para que rindan. Se debe empezar por ahí, también es una realidad que entre más resultados mejores tengas, más puedes hablar, exigir; a todos nos ha tocado callarnos, pero también hay formas de lo que callas, una falta de respeto nadie lo puede permitir”.
“A nivel de exigencia, cuando te dan más cosas, se vale que te exijan más y eso es un dar y recibir. Hace falta que se nos exija más, se nos brindan más oportunidades y obviamente con el tiempo que todo eso vaya mejorando, los sueldos, todavía está esa diferencia de clubes que apuestan y otros no tanto (a la Liga MX Femenil), pero se puede, la cosa es que se quiera, que se piense, las cosas de la nada no llegan, siempre se tiene que hacer una estrategia para que haya ganancia, nosotras nos demos más a conocer, solo hay que querer y realmente interesarse por el femenil”.