Desirée Monsiváis, tranquila tras su retiro: “Me quedo con todo lo bonito; el fútbol es un antes y un después de la mujer que soy”
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La histórica exjugadora Desirée Monsiváis platicó con nuestros compañeros de Peloteando sobre su reciente retiro del fútbol, decisión que tomó después de pensarlo mucho y de la que no se arrepiente pues considera que con el deporte quedó ‘tablas’ ya que no se deben nada entre ellos.
“Es una decisión que inevitablemente tiene que llegar. Me siento tranquila porque ya lo venía meditando. Fue el momento de hacerlo. No me puedo quejar de nada, el fútbol me quitó mucho, pero me dio muchísimo. Estoy contenta de esta decisión. No me debe nada, y yo no le debo nada. Estoy muy agradecida, contenta, tuve esa madurez para dominar la frustración en el fútbol. Estoy tranquila. Ya lo lloré, sufrí, maldije, pero también me quedo con todo lo bonito. Es un antes y un después de la mujer que ahora soy”.
Monsiváis también habló de su carrera, desde que se aventuró en Kazajistán, hasta lo que sintió al ser parte de una ‘primera generación’ de la Liga MX Femenil.
“Llegó la oportunidad (de ir a Kazajistán) por parte de un entrenador de Estados Unidos. Le encantaba la picardía del fútbol latino. En ese entonces que me pagaran por jugar era un logro. Me fui a la aventura solita. Ahí estuve un año, fue un retiro deportivo espiritual”.
“Fuimos las primeras que sentimos la incertidumbre. No sabíamos si (la Liga MX Femenil) se iba a quedar. Santos Laguna fue muy honesto porque había reglas iniciales como el tope salarial, la edad (sub 23 más dos refuerzos mayores). En esa época ya tenía 28 años imagínate para mí la sorpresa de que no pudiera estar en un equipo porque ya no daba la edad y yo estaba en plenitud”.
“Tenía un vínculo con Monterrey porque había hecho mi carrera ahí, así que fue más sencillo llegar a Rayados. Ahí aprendí lo que es sentarte con ‘viejos lobos de mar’, con la directiva para empezar a negociar. Esa sinceridad me transmitió muchísima ilusión, me movía el hambre de seguir jugando y, a su vez, hacerlo en una institución con mucho crecimiento. Es un club que tenía todo el soporte. Fue enriquecedor para Rayadas que en 2017-2018 se haya llegado a la final, donde se rompió el récord de asistencia. Fue un parteaguas para darse cuenta que en México el fútbol femenil tenía mucho material para explotar”.
Por último, con miras al futuro, Monsiváis analiza que hace falta a comparación del comienzo de la liga femenil en el 2017.
“Se puede segmentar. Selección nacional debe ser ese filtro al que puedes llegar y la Liga MX tiene que ser un nicho que pueda nutrir a la selección. Para esto necesita desarrollar a jugadoras mexicanas. Las extranjeras te ponen la vara muy alta en cuestión de nivel, pero de pronto te ponen este filtro en cuanto a los contratos. Hay que llevarlas (a las jugadoras) paulatinamente para que no exista el rezago. Es llevarnos de la mano a todos los que queremos aportar como se hizo en un principio”, concluyó la exgoleadora.