- Luis Rubiales festeja de manera polémica el título de España al besar a Jenni Hermoso
- Luis Rubiales ofrece disculpas públicas tras el polémico festejo en el que besó a Jenni Hermoso
Jenni Hermoso comparte sus primeras impresiones públicas después del polémico acto de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), durante la premiación del título de España en el Mundial Femenil. Lo hace a través de FUTPRO, sindicato que la representa.
“Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto”, señaló la jugadora.
En el texto publicado por FUTPRO se pide “adoptar medidas ejemplares” y “velar por los derechos” de las jugadoras:
“Desde nuestra asociación pedimos a la RFEF que implemente los protocolos necesarios, vele por los derechos de nuestras jugadoras y adopte medidas ejemplares. Es esencial que nuestra selección, actual campeona del mundo, esté siempre representada por figuras que proyecten valores de igualdad y respeto en todos los ámbitos. Es necesario continuar avanzando en la lucha por la igualdad, una lucha que nuestras jugadoras han liderado con determinación, llevándonos a la posición en la que nos encontramos hoy”.
El comunicado hace un llamado al Consejo Superior de Deportes para apoyar y promover “la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo”.
“FUTPRO rechaza cualquier actitud o conducta que vulnere los derechos de las futbolistas y desde el sindicato estamos trabajando para que actos como los que hemos visto nunca queden impunes, sean sancionados y se adopten las medidas pertinentes que protejan a las futbolistas de acciones que creemos son inaceptables”, finaliza.
FIFPRO apoya a Jenni Hermoso
Por su parte FIFPRO respaldó el comunicado de la Asociación de Futbolistas Españoles, solicitando que se investiguen los actos de Rubiales en virtud del código ético de la FIFA:
“Reiteramos que fue profundamente lamentable que un momento tan especial para las futbolistas de la selección española, que tenía lugar ante una audiencia televisiva mundial, se viera manchado por la conducta inapropiada de una persona en un papel que conlleva tanta responsabilidad”.
“Los acercamientos físicos no iniciados y no invitados hacia los jugadores y jugadoras no son apropiados ni aceptables en ningún contexto, y especialmente cuando son puestos en una posición de vulnerabilidad por una persona que tiene una posición de poder sobre ellos en su lugar de trabajo”