Un conflicto entre las jugadoras de la selección de Sudáfrica que disputará el Mundial Femenil 2023 y la federación nacional de fútbol por premios y otros reclamos obligaron que se improvisara un equipo de con futbolistas desconocidas, entre ellas una de 13 años, para afrontar el domingo un partido amistoso contra Botswana.
El partido iba a ser el último fogueo de las campeonas africanas en casa antes de irse a la Copa del Mundo en Australia y Nueva Zelanda, pero acabó en un papelón: todo el equipo nacional lo boicoteó.
Un 11 improvisado
Un equipo improvisado con jugadores de clubes locales perdió 5-0 ante Botswana en el estadio Tsakane, ubicado cerca de Johannesburgo. Se fueron abajo 4-0 al descanso en un partido que arrancó con un retraso de una hora, a pedido de la Asociación Sudafricana de Fútbol para poder armar un equipo.
La seleccionadora Desiree Ellis dijo que una de las jugadoras que debió alinear tenía 13 años de edad. Entrevistada tras el partido, Ellis no se refirió a los reclamos del plantel titular.
Las mundialistas recién se apersonaron en la cancha durante al descanso y presenciaron el partido desde las gradas.
Los motivos del boicot
La federación tampoco mencionó lo que provocó el conflicto, pero Thulaganyo Gaoshubelwe, el presidente del gremio nacional de futbolistas, dijo que el incidente fue causado por la pésima paga que las jugadoras reciben.
“Están luchando por sus derechos”, dijo Gaoshubelwe sobre las mundialistas en un video difundido en la cuenta de Twitter del gremio de futbolistas. “SAFA (las siglas de la federación) no quieren incluir dinero en sus contratos. Tenemos que luchar por los derechos de estas jugadoras”.
Gaoshubelwe cargó la culpa a Danny Jordaan, el presidente de la federación.
El ministro de deportes de Sudáfrica, Zizi Kodwa, dijo en un comunicado que sostendrá una reunión con el gremio de futbolistas “para escuchar los reclamos planteados por el equipo”. Se indicó que abordarán sobre las “condiciones de trabajo” de las jugadoras y sus contrato.
¿Qué pasa con el Mundial?
La selección debe viajar a Nueva Zelanda en dos grupos el martes y miércoles. Tienen previsto un último amistoso previo al debut mundialista, midiéndose contra Costa Rica el 15 de julio en Nueva Zelanda.
Sudáfrica ganó la Copa Africana de Naciones el año pasado para conquistar su primer gran internacional, pero las jugadoras se han quejado que no reciben los mismos beneficios de la selección masculina.
En el Mundial, Sudáfrica será rival de Suecia, Argentina e Italia en la fase de grupos.